El albergue municipal de animales denunció ayer que en la noche del lunes al martes el centro sufrió el robo de un perro de raza pit bull y que en el asalto quedó inutilizada la valla del recinto.

Según los trabajadores de la perrera, el servicio de emergencias había encerrado en el albergue el domingo por la noche a un pit bull y el lunes por la mañana la Policía Local les había advertido de que si alguien venía a reclamarlo lo pusieran en contacto con agentes y que no se lo entregaran bajo ningún concepto. Nadie reclamó el pit bull durante el día, pero por la noche alguien acudió hasta la perrera y rompiendo por dos lados el cierre perimetral del recinto, se marchó con el animal. Los trabajadores aprovecharon el incidente para volver a reclamar cámaras de seguridad en las instalaciones.