Izquierda Socialista, corriente autónoma dentro del PSOE criticó ayer a través de un comunicado a quienes "pretenden imponer la cultura del miedo, la intolerancia y el insulto", después de que el concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Oviedo Ricardo Fernández no pudiese completar su intervención el pasado miércoles en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA, durante un debate acerca del cambio del nombre de calles en Oviedo por la ley de Memoria Histórica. El edil fue interrumpido desde varios puntos de la sala en más de una ocasión y optó por abandonar el Club pese a las invitaciones a que reanudase su intervención. Izquierda Socialista opina que el incidente "deja en mal lugar al Club Prensa Asturiana", y exige a los medios que censuren los hechos "para evitar con ello que se reproduzcan situaciones impropias de una sociedad democrática".