"He recogido 270 firmas, en todas las casas del edificio". El recuento que hace Enrique Rivero, erigido en portavoz vecinal y en recolector de sus firmas, habla de que se ha acercado mucho a la unanimidad a la hora de recoger adhesiones al rechazo del cambio de nombre de la calle Yela Utrilla, en el entorno de la plaza de la Gesta, por el de Arquitectos Galán. Este último es ya en realidad el nombre oficial de la vía, desde que el pasado día 2 la junta de gobierno municipal acordarse aplicar la ley de Memoria Histórica a 21 calles y plazas de la ciudad. Yela Utrilla es ya, por tanto, Arquitectos Galán, igual que Calvo Sotelo es Federico García Lorca y que la plaza de la Gesta se llama plaza del Fresno, tres ejemplos en el entorno del lugar donde resuenan nuevas quejas.

Yela Utrilla parte en perpendicular desde Calvo Sotelo hacia la trasera del Auditorio y deja a su izquierda el patio del instituto Alfonso II. A la altura de la puerta de servicio del Auditorio, la vía dobla 90º y transcurre hacia la plaza de la Gesta. La calle tiene únicamente un portal, con unas 120 viviendas. Allí, Enrique Rivero ha recogido 270 firmas contra el cambio de nombre. Tiene previsto entregarlas próximamente en el registro municipal, como ya ha hecho el colectivo de vecinos de la plaza de la Gesta. "La gente no quiere estos líos, muchos son mayores y les cuesta asimilar el cambio. Temen que no les llegue la correspondencia importante: el banco, los seguros, las citas del médico, los recibos... Es un engorro para ellos", lamenta Enrique Rivero, que ha detectado entre sus vecinos "un desacuerdo total" con la medida adoptada por el Ayuntamiento.

Los arquitectos Galán fueron Julio Galán Carvajal y su hijo Julio Galán Gómez, ambos con numerosos edificios bajo su firma no solo en Oviedo sino en toda Asturias. El padre, nacido en Avilés, fue arquitecto municipal de Oviedo en los años veinte del siglo pasado. Su hijo, gallego de nacimiento, fue también arquitecto municipal, aunque en este caso en Langreo y treinta años más tarde.

Los nuevos nombres de las calles ya son efectivos en las áreas que dependen directamente del Ayuntamiento, como el padrón y el censo electoral, que ya ha sido modificado.