La junta de gobierno del Ayuntamiento de Oviedo resolvió ayer, tras varios meses de vicisitudes y con un recurso por resolver, la adjudicación de la perrera municipal. Será la clínica veterinaria Quirós la que finalmente se encargará de esas instalaciones municipales por un periodo de dos años, prorrogable por otros tantos. La concejala del área de Educación y Deportes, Mercedes González (Somos), que ha tutelado todo el proceso, anunciaba ayer que en esta nueva etapa del albergue se promoverán las adopciones y se intensificará la presencia del servicio en las redes sociales.

Mercedes González confía en que los profesionales de la clínica veterinaria Quirós estén trabajando en las instalaciones de La Bolgachina en febrero. El equipo de gobierno municipal seguirá adelante con las obras, que comenzaron por el derribo de las construcciones más deterioradas y que ahora tienen previsto seguir por el acondicionamiento de las oficinas y los vestuarios. Contarán con la opinión de la empresa para ejecutar ésas y otras actuaciones, explicó la concejala.

Además de reforzar el programa de adopciones y la presencia de la perrera en internet, los nuevos gestores de la perrera deberán ser más restrictivos en la recogida de animales, que será "sólo de los del municipio de Oviedo: se recogerán menos y podrán estar en mejores condiciones", indicó la edil.

La concejala admite que el camino para reorganizar la perrera municipal está siendo tortuoso. El recurso de la otra empresa que se presentó al concurso convocado por el Ayuntamiento, y a la que inicialmente se adjudicó la gestión, sigue sin resolverse, pero según González "no tiene porque paralizar la adjudicación".

González repasa los avatares del concurso. Primero, refiere, se paralizó para que pudieran presentarse las sociedades protectoras de animales, modificando las condiciones de adjudicación. No sirvió de nada, porque no se presentó ninguna. Luego, una vez adjudicado a la escuela de adiestramiento Canmar, resultó que ésta no tenía, en palabras de la Concejala, "solvencia económica ni técnica". Canmar presentó un recurso contra las condiciones del concurso, que es el que ahora está pendiente de resolución.

"La clínica Quirós tiene buenos informes técnicos y del colegio de Veterinarios, y nosotros haremos un seguimiento exhaustivo de la concesión", manifestó ayer la concejala.

La gestión de la perrera municipal estuvo en manos de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas durante los últimos veinte años. Una de las condiciones para la concesión era que no se sacrifiquen animales.