María Latores es una fuerza de la naturaleza, además de una mujer que transmite positividad y alegría en igual proporción. Estudió Magisterio y se especializó en Infantil, Primaria y Pedagogía Terapéutica. En la actualidad, trabaja como tutora de educación especial en el centro Aspace de Latores. Su faceta laboral es apenas una parte de esta mujer que cree firmemente que el que la sigue, la consigue, algo que se refleja igualmente en su brillante trayectoria como cantante de tonada asturiana. Su incursión en el mundo del folklore astur lo hizo con apenas 10 años. "Entonces entré en un grupo de baile regional, a los once cambié a otro y luego seguí con Filandón. Allí estuve once años y al final lo dejé a los 21 años para dedicarme a cantar tonada", recuerda, mientras prepara con rapidez el plato que hoy protagoniza esta página.
En todos estos años, María Latores se ha labrado un nombre en el mundo de la tonada, donde ha ido cosechando todo tipo de premios. Por citar algunos, ahí están "el premio de aficionados que gané en Ponga y luego segundas, terceras, cuartas y quintas posiciones tanto en el concurso Ciudad de Oviedo como en otros lugares de Asturias", explica, al tiempo que recuerda que, entre sus temas favoritos están "Donde yo me pueda ir", "La mío neña", "Al pasar por el puerto" o "Arboleda bien plantada". Muy conocido es el tema que ella misma escribió y dedicó a su abuelo, "Siendo guaje fue a la mina", una canción que, matiza, "reservo para festivales, pues no es un tema tradicional".
Actualmente, y tras un año fuera de Asturias por motivo de estudios, ha regresado al grupo de música tradicional "Muyeres", que en la actualidad está representando por toda Asturias y con gran éxito su espectáculo "País malva". "Por estudios y con gran dolor de mi corazón tuve que dejar 'Muyeres' y la tonada. Por fin de vuelta en casa he regresado al grupo y estoy encantada".
Mujer sensible y cercana, con apenas 29 años editará en unos meses su primer libro de poesía. "Para mí la poesía es mi vida. Llevo 17 años escribiendo y es algo que forma parte de mí, refleja cuanto me sucede, lo que siento, lo que me conmueve, lo que vivo. Entre los poetas clásicos mis favoritos son Neruda, Benedetti y Salinas y, entre los actuales, me encantan Ojeda, Pablo Benavente y el rapero Zpu".
Nacida en Oviedo, no tiene más que elogios para su ciudad, a la que define como "la ciudad más guapa del mundo". "Me encanta, tiene un casco antiguo precioso y una catedral única. Pasear por sus calles me sigue inspirando siempre. Yo soy lo que se dice de Oviedo de toda la vida", precisa.
En cuanto al plato que presenta hoy, lo define como "rico, sencillo y diferente, lleva ingredientes fáciles de encontrar y resulta muy sabroso. Lo cierto es que gusta a todo el mundo".
