La falta de abastecimiento de la vacuna para los niños de 6 años destinada a inmunizarlos contra el tétanos, la difteria y la tosferina recuerda lejanamente a lo sucedido meses atrás con el retraso de la llegada a Asturias del "pinchazo" contra la gripe. La falta de vacunas, el adelanto de la gripe -a principios de diciembre cuando en los últimos años el virus solía desembarcar en Asturias con la Nochevieja a las puertas- y la baja tasa de personas que acudieron a vacunarse son algunas de las causas por las que la epidemia de gripe ha sido este año una de las peores desde 2008. El virus de la gripe ha pegado duro sobre todo entre las personas mayores de 65 años. En el pico más alto de la epidemia gripal en Asturias, según datos de la consejería de Sanidad, se llegaron a registrar hasta 5.000 casos cada semana. Esto llevó a que se disparasen el número de entradas en el servicio de urgencia y a provocar retrasos en los centros de salud. Y es que a la gripe se sumó la falta de personal, con muchos médicos de vacaciones y otros estudiando para las oposiciones convocadas por el Principado.
