Adrián Fernández asegura que aún no ha podido sobreponerse del susto tras la reyerta en la que se vio inmerso el pasado jueves en Colloto, una sangrienta refriega que acabó con su mujer y otras dos personas "del otro bando" detenidas con heridas derivadas de la pelea. "Se presentaron en nuestra casa con hachas y fueron directamente a por nosotros. Si no aparto a la cría -por su hija de cuatro años- la matan a hachazos", explica Fernández.

Adrián Fernández asegura que el origen de la reyerta fue algo tan simple como un termómetro. "Mi mujer se lo había pedido a la madre de unos niños que van al mismo colegio que las nuestras y la dueña del aparato estuvo toda la tarde escribiéndonos para que se lo devolviésemos. Le dijimos que viniese a casa a por él cuando quisiese y se presentó aquí con dos personas que llevaban encima hachas", explica.

Según su versión, dos de los ahora detenidos, un padre y un hijo que residen en Colloto (el más joven es el novio de la supuesta dueña del termómetro), entraron en el patio de la vivienda de planta baja con los hachas en la mano. "Primero atacaron a los dos perros que tenemos y después fueron a por nosotros, pero uno de los animales resultó herido", asegura Adrián Fernández. Entonces comenzó verdaderamente la reyerta. "A mi mujer le pasó el filo del hacha al lado de la nariz, estuvieron a punto de matarnos y nosotros, por supuesto, tratamos de defendernos. Hasta nos tiraron un machete", señala el joven. "Empezamos a lanzarles todo lo que teníamos a mano y en una de estas, cuando estábamos siendo atacados, mi mujer cogió una piedra del suelo, se la tiró a uno de ellos y le dio en toda la cara", asegura Adrián Fernández. "Tenemos mucha suerte de estar vivos. Estuvimos a punto de morir sin haber hecho nada", asegura. El hombre al que le impactó la piedra tuvo que ser atendido en el hospital "con importantes heridas en la cabeza", según explica Fernando de Barutell, el letrado que se encarga de asesorar al padre y al hijo.

Y es que los hombres tienen una versión muy diferente de los hechos. Ellos aseguran que fueron a la vivienda en la que residen Adrián y su mujer "porque tienen firmado un contrato de alquiler con el propietario de la casa" y la pareja que reside allí "no está dispuesta a salir de la casa de ninguna forma". Los dos hombres ahora detenidos consideran que los jóvenes "son unos okupas" y fueron "tranquilamente a hablar con ellos", pero "se pusieron violentos" y la cosa acabó en una reyerta que puso en estado de alarma a Colloto, ya que hasta el lugar de los hechos se desplazaron "cinco coches de Policía y dos ambulancias", según declaró un testigo.

Los tres detenidos pasarán hoy a disposición judicial. La Policía no descarta nuevas detenciones porque sospecha en la pelea había más gente "que logró huir".