Los ingenieros de Socinser Engineering lo mismo diseñan el mobiliario de un hospital que un implante o una prótesis. Tienen veinte patentes y han desarrollado setenta proyectos. En el centro de empresas de ciencias de la salud de La Corredoria son los veteranos, con veinte años de trayectoria. Hasta hace poco tenían su sede en Gijón, pero los gestores del Vivarium consiguieron atraerlos. "Hicieron muchos esfuerzos por captar nuestro interés", asegura Susana Argamentería, responsable de marketing, comunicación y calidad de la empresa. Socinser cuenta con siete trabajadores en plantilla. Para sus proyectos más ambiciosos recurre a la externalización del trabajo: ha llegado a contar con cerca de treinta profesionales. "La gente cada vez está más informada y quiere tecnología", según Argamentería.
