Dos de las tiendas del entorno del bazar chino incendiado de la avenida de Pumarínbazar chino incendiado de la avenida de Pumarín que resultaron afectadas por el fuego y el humo han reabierto sus puertas siete días después del siniestro. Se trata de una pizzería del número 34 de la calle y de otro comercio oriental ubicado en el 38. Es decir, que pertenecen a los edificios anexos al inmueble en el que se desató el fuego. El único establecimiento que sigue cerrado además del bazar chino es la peluquería de al lado, en el 36, que luce un cartel en el escaparate: "Abrimos jueves o viernes. Disculpen las molestias". Y es que en el edificio del incendio ahora mismo no hay agua, luz, ni gas.

La reparación de las bajantes ha finalizado esta mañana y la revisión de la instalación del gas está a punto de terminar a falta de que los técnicos entren el piso 3ºC. Los vecinos están pendientes de que los aparejadores entreguen un informe definitivo al Ayuntamiento para obtener el visto bueno a su regreso a casa. La comunidad del 36 de avenida de Pumarín fue desalojada el día del incendio y la mayor parte de los residentes viven temporalmente en hoteles pagados hasta hoy por el Ayuntamiento.

Los trabajadores de la pizzería, Inderjit Singh y Jorge Pinteiro, subieron la persiana del local a primera hora sin ni siquiera despegar el precinto de los Bomberos de Oviedo de la verja para volver a la normalidad de sus encargos a domicilio cuanto antes. El otro bazar oriental del 38 de la avenida de Pumarín quitó el aviso de "Cerrado por humo" y atendió a sus clientes sin problemas ni olor a quemado. Eso sí, clausuraron una parte de la tienda en la que el jueves pasado se desprendió parte del techo por efecto del fuego en el edificio de al lado, con el que se comunica.

La Policía Científica también ha estado en Pumarín esta mañana junto a los aparejadores y los técnicos del gas, aunque no ha facilitado datos sobre el avance de su investigación, que servirá para esclarecer las causas del fuego y depurar responsabilidades. El desescombro del almacén del bazar chino será fundamental, pero aún no hay fecha fija para se ponga en marcha. Una empresa especializada deberá hacerse cargo de la tarea ante la presencia de amianto en las cubiertas. Tres seguros deben ponerse acuerdo para elegir a la compañía que hará el desescombro: el seguro de la comunidad, el del propietario del local en el que está el bazar y el de los inquilinos del establecimiento oriental.