Tras la aparición de unos carteles disuasorios en las oficinas municipales de Recaudación donde se ordena que los pagos de multas e impuestos que tengan carta de pago se hagan a través de los bancos o de la página web, fuentes municipales indicaron ayer que los recelos de los funcionarios ante los pagos en metálico son el resultado de la práctica de algunos contribuyentes de abonar sus tasas con billetes de hasta 500 euros.

El Ayuntamiento, según estas fuentes, quiere tratar de evitar estas situaciones, como los funcionarios del servicio de Recaudación, y por eso plantea que el pago en mano en la caja resulta algo anacrónico, un retraso para la administración.

Lo que el tripartito está analizando en estos momentos, y que de alguna forma tendría relación con los carteles informativos y disuasorios que han aparecido en la oficina de Recaudación, es lanzar una campaña en el municipio para impulsar la domiciliación bancaria entre los contribuyentes y otros métodos de pago, como el que ofrece la página web municipal del servicio de Recaudación.

Fuentes próximas al tripartito restaron importancia a los carteles instalados por los funcionarios que ordenan que no se pague en metálico en la oficina cuando haya carta de pago y afirmaron que carteles muy parecidos a estos ya estaban en el anterior servicio externalizado de La Auxiliar de Recaudación.