"Es imprescindible usar una tela blanca de algodón para preparar un cadáver por el rito islámico". El representante de la comunidad musulmana en Asturias ha negado esta mañana la posibilidad de que la mortaja de Imran, una colcha, responda a las costumbres de su pueblo y ha explicado minuciosamente el proceso previo de enterramiento que se hace en los países árabes. "Primero se lava el cuerpo en base a la ablución de la oración, se envuelve y se reza".

El mediador intercultural ha afirmado también en la sala de vistas que el cadáver debe estar desnudo. El pequeño Imran fue hallado dentro de una maleta, envuelto en una colcha y con una chillaba puesta. Según los investigadores de la Policía Científica, fue lavado deliberadamente tras fallecer por causas violentas y amortajado con sumo cuidado.