La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) acaba de ratificar las medidas cautelares que paralizaron en primera instancia el concurso-oposición para dotar de personal a un nuevo servicio de Recaudación Municipal.

El fallo del TSJA se enmarca dentro de la compleja sucesión de pleitos y recursos formulados a raíz de la decisión del equipo de Gobierno de iniciar una remunicipalización de la gestión de las tasas y tributos, hasta el año pasado en manos de La Auxiliar de Recaudación. Aunque finalmente los tribunales tumbaron ese proceso por considerar que vulneraba las leyes nacionales que regulan la oferta de empleo público, antes de que se produjeran esas sentencias los abogados de los trabajadores de La Auxiliar habían solicitado una paralización cautelar de las oposiciones. Es sobre esa medida cautelar sobre la que se pronuncia ahora el TSJA, confirmándola al margen de las sentencias que llegaron después.

El TSJA aprovecha su fallo para analizar el posible conflicto entre haber continuado con el proceso de las oposiciones o, como sucedió, la paralización cautelar de las pruebas. Y concluye que los perjuicios tanto para los trabajadores de La Auxiliar como para los opositores habrían sido mayores de no haberse paralizado las oposiciones. Considera así el TSJA un mal menor que el Ayuntamiento haya tenido que paralizar la formación de su cuerpo de recaudadores.

Si las oposiciones se hubieran llevado a término, concluye el TSJA, "estaríamos ante una situación de difícil reversión". Sin embargo, los problemas derivados de haber paralizado el proceso "no son tan intensos para los intereses públicos", explica la sentencia. La prueba, dice el TSJA, está en "el sistema de concierto aprobado con otra Administración pública para la prestación del servicio hasta que lo pueda prestar con sus propios medios".