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Los dueños de perros exigen "una reforma urgente" del parque canino del Campo

Los usuarios afirman que el recinto se ha convertido en un "gueto perruno", que "no es digno para Oviedo" y que es "insalubre"

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Parque de perros en el Parque San Francisco de Oviedo

Los usuarios del parque canino situado en el Campo San Francisco ya no saben como hacer que el Ayuntamiento les escuche. Las personas que llevan a sus animales a dicho recinto aseguran que las condiciones en las que se encuentra no son dignas del espacio verde más importante de la capital del Principado de Asturias y que sus mascotas conviven a diario en lo que ya han bautizado como un "gueto perruno". Los usuarios denuncian que la parcela destinada a los animales está "llena de agujeros y suciedad, con los cierres rotos" y que "se llena de barro en cuanto caen cuatro gotas de lluvia", explica Sara González, que ayer se encontraba en el Campo San Francisco con su perro "Otto".

Los dueños de las mascotas afirman incluso que el recinto es "insalubre". Según González, "somos nosotros los que recogemos los excrementos dentro del parque porque aquí pueden pasar meses sin que venga nadie a hacerlo". Para ella, "recoger las cacas de los perros es una obligación de los dueños, pero es necesario llevar a cabo un mantenimiento periódico igual que se hace en el resto del Campo porque en caso contrario esto se convierte en un estercolero".

A las doce del mediodía de ayer, mientras un par de perros corrían uno detrás del otro, había dos vallas de obra tapando un agujero en mitad del recinto. "Llevan un montón de tiempo metiendo por aquí una tubería y han formado un surco en el suelo que, además de llenarse de barro cuando llueve es peligroso para los perros", explica Chema Pérez, la pareja de Sara González. Por otro lado, "el parque está lleno de agujeros por todos los lados porque nadie viene a taparlos, no hay ni un sólo trozo de césped y los perros están obligados a rebozarse entre la tierra", recalca.

Cuando "Brok" echa a correr no hay quien lo pare. Es lo que tienen los border collie, que son una raza juguetona y su relación con otros perros suele ser amigable. Pero a su dueño, Arturo Álvarez, cada vez le cuesta más llevarlo al parque canino del Campo San Francisco. "Esto es una vergüenza. Los que tenemos perros tenemos un montón de obligaciones, como es lógico, pero no tenemos ningún tipo de derecho. Se supone que estos parques son los únicos sitios de Oviedo en los que puedes soltar a los animales y lo cierto es que están hechos un asco", afirma.

Álvarez muestra una bolsa de plástico atada a la parte de arriba de la portilla que da entrada al recinto como muestra de la "lamentable situación" en la que se encuentran las instalaciones. "No hay ni un cierre en condiciones. La puerta se abre y el vallado que hay alrededor del recinto está entero roto, con lo que no es raro que los animales se escapen", recalca. Algunos, como Tomás Martínez, no quieren ni siquiera acercarse al parque canino con su mascota. "Yo no meto a la perra ahí ni harto de vino. Si entramos agarra una infección que me la entierran", afirma de forma contundente. Él prefiere pasear con "Luna" atada que meterse en una parcela "que da pena verla".

Otra de las quejas se basa en la falta de equipamientos. "Conozco otros parques caninos en los que hay algún tipo de juegos para los perros, sitios bien acondicionados para echar los excrementos, bebederos para los animales... Aquí no hay absolutamente nada. El Ayuntamiento ha endurecido las multas contra los dueños incívicos, pero pone poco de su parte", subraya Elsa Suárez.

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