El XI Festival de la Canción Misionera, organizado por el grupo de Gijón de la delegación diocesana de misiones, se celebra mañana en Oviedo y estará dedicado este año a los niños de Guinea Ecuatorial. Con el certamen se apadrina un proyecto solidario que las Hijas de la Caridad están desarrollando en ese país africano, para garantizar al menos una comida diaria a los escolares.
En el concurso, que tendrá lugar en el colegio de Santa Teresa de Jesús, situado en la ladera del Naranco, participarán ocho agrupaciones corales de colegios y parroquias de las cuatro ciudades asturianas: Mieres, Avilés, Oviedo y Gijón.
Es un festival abierto a todo el público y la entrada es gratuita, aunque a la puerta del salón donde se va a celebrar habrá un par de huchas para quienes deseen hacer su aportación para los comedores escolares en Guinea.
Martina González, portavoz de la organización, explicaba ayer que, más allá del interés artístico y musical, el Festival de la Canción Misionera se propone "sensibilizar a los niños sobre lo que es la misión y de que no sólo se trata de ir a lugares lejanos a ayudar sino también de hacerlo desde aquí, cada cual a su estilo y manera".
Los donativos que se recauden en esta edición estarán destinados al colegio de La Milagrosa, en la localidad guineana de Mokom, que está en el interior de la selva. Allí la congregación de las Hijas de la Caridad quiere proporcionar a los niños una comida diaria.
La orden misionera lleva trabajando en Guinea Ecuatorial 26 años y en ese tiempo en Mokom, donde residen unas diez mil personas, ha levantado un hospital.
