La magistrada titular del juzgado de instrucción nº 4 de Oviedo ha dictado orden de prisión provisional comunicada y sin fianza por robo con violencia y detención ilegal contra H. B. H., el hombre acusado de secuestrar a un taxista en Oviedo el pasado 26 de marzo.

El hombre sido enviado a prisión tras prestar declaración esta mañana en los juzgados de la capital asturiana. El detenido solo ha respondido a las preguntas de su abogado, que ha anunciado que recurrirá la orden de prisión. Su causa se trasladará ahora a los juzgados de Avilés, según indicó.

El acusado, de nacionalidad rumana y 26 años de edad, tiene su residencia desde hace diez años en Valencia. Según la Policía Nacional había cometido hechos similares al secuestro de Oviedo en tres ocasiones posteriores, dos veces en Santiago de Compostela y otra en Lugo.

La investigación se inició el 26 de marzo, cuando se produjo el secuestro. Los hechos, según el relato policial, comenzaron en la calle Alonso Quintanilla de Oviedo cuando, sobre las nueve menos cuarto de la noche, el individuo se subió al taxi y pidió al conductor que le llevase al Aeropuerto de Asturias. Llevaba una maleta, según relató la víctima, lo que hizo pensar a los investigadores que había llegado de fuera de Asturias y que probablemente tuviera intención de abandonar de forma inmediata la región.

Poco antes de llegar al destino el pasajero sacó un arma de fuego y ordenó al taxista para que se dirigiera a un pueblo apartado, para a continuación circular por varias localidades cercanas al aeropuerto, finalmente el secuestrador le obligó a conducirlo hasta Avilés donde liberó al taxista. Antes de irse le sustrajo el teléfono móvil y 350 euros.

Durante todo el trayecto el taxista temió por su vida ya que las amenazas fueron de "quitarle la vida" si no hacía lo que le ordenaba, actuando en todo momento con gran sangre fría, refieren fuentes de la Policía Nacional.

Una vez identificado el autor de los hechos, los investigadores de la Policía Nacional lograron localizarlo en Gijón. Los miembros de la Jefatura Superior de Asturias, en colaboración con miembros de la Comisaría de Gijón, dispusieron un dispositivo en esa ciudad para su detención.

En el momento en el que los agentes de la Nacional lo detuvieron a H.B.H. llevaba encima una pistola, que resultó ser de balines, con la que habría cometido los hechos y un dispositivo Tasser de descarga eléctrica de alto voltaje.