La "preba" de la sidra de la calle Gascona se suma a las reivindicaciones sobre el valor de la bebida autóctona subiendo de tres a cuatro euros el precio del "pack sidrero" de cara a la 18ª edición que se celebra este domingo en la emblemática vía ovetense con la participación de 18 llagares de toda Asturias y una previsión de escanciado de 6.500 botellas.

Los cuatro euros de la inscripción permitirán a los participantes acceder a una hoja de votación que deberán rellenar para contribuir al fallo del premio popular. Documento que irá acompañado de un lápiz para votar, un vaso para saborear y un pañuelo verde que pretende dar colorido al evento.

Una pequeña subida que sigue la senda de los lagareros y hosteleros de reivindicar el valor de la producción y la calidad de una bebida que tiene en esta cita ovetense una de sus citas más concurridas y esperadas del año, que año tras año gana adeptos entre los incondicionales del emblemático producto regional.

La degustación comenzará al mediodía. El pregón correrá a cargo del presentador de televisión Alberto Rodríguez y habrá un homenaje a José Álvarez, colaborador y amigo de la asociación de hosteleros del bulevar de la sidra. La cata oficial, como en otras ocasiones, estará guiada por Luis Estrada y el jurado de expertos estará compuesto por Maximino Villarica, Gumersindo Martínez, Joaquín Cernuda, Severino Cueva y Agustín Rodríguez.

Los 18 llagares que toman parte de esta edición son: Castañón, Cortina, El Gobernador, Fonciello, Foncueva, Herminio, JR, L´Argayón, La Llarada, Menéndez, Muñiz, Orizón, Peñón, Roza, Trabanco, Vallina, Viuda de Angelón y Viuda de Corsino.

El concejal de Economía, Rubén Rosón aprovechó la presentación de la cita, a la que también acudieron el presidente asociación de sidrerías de la calle Gascona, Paco Colunga, y Andrés Alonso, del llagar Herminio, como representante del sector para destacar su capacidad de dinamizar el turismo en la ciudad. "Gascona es un producto turístico propio que colabora en la promoción de todo Oviedo", señaló sobre una "preba" que calculó que reunirá a "unas 7.000 personas".