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Colloto

La presión policial no consigue acabar con la oleada de delincuencia que sufre Colloto

El Ayuntamiento reconoce que siguen los robos y las agresiones a pesar de que existen "importantes dispositivos" de vigilancia en la localidad

Es cierto que en Colloto hay más policías que hace dos meses. El movimiento ciudadano que surgió en marzo a raíz de la oleada de delincuencia que afecta al pueblo -la localidad llegó a echarse a la calle para manifestarse contra los robos y las agresiones- provocó que las fuerzas del orden reforzasen su presencia en Colloto, pero los hechos demuestran que las medidas no han causado el efecto esperado. El propio concejal de Seguridad Ciudadana, el socialista Ricardo Fernández, reconoce que sigue recibiendo quejas de los vecinos y que en la localidad aún son frecuentes los actos delictivos.

"Estoy en contacto directo con la asociación de vecinos y me dicen que todavía se registran delitos. Los hay y estamos al tanto", afirma Fernández. El concejal asegura que tanto la Policía Nacional como la Local mantienen en Colloto "importantes dispositivos" de vigilancia para tratar de atajar la delincuencia, que cada vez hay más patrullas en determinados puntos del pueblo considerados conflictivos, pero que todo ese despliegue no parece amedrentar a los autores de las fechorías. "Sigue habiendo robos en coches y atracos en plena calle. Además, hay personas que tienen atemorizados a los chavales del pueblo", denuncia una vecina que prefiere mantenerse en el anonimato, "por si acaso hay represalias".

Según la mujer, "Colloto está lleno de policías. A veces te los encuentras en cada esquina, pero parece que los tienen controlados y cuando se van vuelven a actuar". Los vecinos aseguran que los robos y las agresiones coinciden con la llegada al pueblo, a principios de año, de "unas familias conflictivas" que residen en las viviendas de protección oficial situadas en el entorno de la plaza del Pueblo de Madrid. Desde esa fecha se han denunciado robos en coches, atracos, en plena calle, amenazas... Hasta la bedel del centro social sufrió el ataque de dos menores de 14 años que la intimidaron pidiéndole el móvil y el ordenador para dejarla en paz después de que ella les hubiese reprendido por fumar porros en el baño. La mujer le dijo a la Policía que los menores llegaron a intentar besarla y tocarle un pecho.

La Plataforma por la Seguridad en Colloto, promovida por la vecina Nuria Cuartas, acaba de presentar 4.452 firmas en los Ayuntamientos de Oviedo y Siero exigiendo más vigilancia. También tienen previsto entregarlas en Delegación del Gobierno.

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