"Parece algo irreal". Así explicaba ayer sus sensaciones Margarita Aldecoa, una de los 60 exalumnos del colegio Marista Auseva -en la imagen de la izquierda, sentados en las escaleras del colegio- que no dudó en viajar desde Bruselas para participar en un acto de reencuentro motivado por la nostalgia y convocado justo 25 años después de su salida del centro. Cita que aprovecharon para visitar las instalaciones, disfrutar de una proyección de fotos antiguas y terminar la jornada con una comida llena de recuerdos y anécdotas. Situación similar a la vivida también por una treintena de miembros de la promoción del 74 del colegio Loyola -en la imagen de la derecha-, que un cuarto de siglo después revivieron con nostalgia su infancia y juventud con otra comida de confraternización organizada en la ciudad.
