El tripartito no dispone de un plan concreto para La Vega. En el precalentamiento para la reunión que mantendrán el 12 de julio el Alcalde de Oviedo y la Ministra de Defensa para hablar del futuro de la Vega, desde Madrid se le echó en cara esta semana al Ayuntamiento que las administraciones local y regional no se hubieran puesto de acuerdo para plantear al Gobierno central una propuesta concreta sobre la que trabajar. La primera teniente de Alcaldía, Ana Taboada, replicó el miércoles que sí lo había, que "las intervenciones" que se podrían hacer en La Vega estaban "determinadas" en el documento con el que Oviedo logró 10,3 millones de fondos europeos para la zona Este de la ciudad. Pero la realidad es que en la ficha técnica de ese informe correspondiente a la Fábrica de Armas, bajo la denominación de "desarrollo estratégico" se incluyen hasta nuevo usos distintos para la parcela, sin concretar ninguno de ellos ni hacer un desarrollo específico de cómo se articularían esas propuestas.
Así, aunque el documento habla de "operación concreta", en su detalle se limita a enumerar "posibles nuevos usos", sacados de "estudios previos" realizados por el Ayuntamiento. En esta lista de hipotéticos futuros para La Vega el documento mete un poco de todo. En primer lugar, un recinto ferial, sin mayor explicación. Después, un mercado de productos agropecuarios locales. En tercer lugar introduce una idea muy parecida a la que ha defendido el PSOE, orientada a un parque tecnológico. En el documento de la subvención europea se explica vagamente un uso vinculado a actividades económicas, investigación e innovación, e introduce entre paréntesis una referencia al "sector biosanitario".
La cuarta hipótesis para La Vega pasa por establecer allí "espacios para centros cívicos y desarrollo de actividades de participación ciudadana". La quinta habla de "desarrollo de servicios sociales, de actividades creativas y culturales que disminuyan el riesgo de exclusión" y también, otra posibilidad más, de "espacios de formación y capacitación dirigido especialmente a colectivos desempleados con dificultad de inserción laboral".
A estos usos sociales y de escuela de formación laboral y de integración le siguen en el catálogo de posibles usos una propuesta para que La Vega también acoja algún tipo de "actividad museística", sin más explicaciones.
En el último apartado, con dos posibilidades complementarias, se hace referencia a "otros usos que exigen grandes espacios" y se explica que existen demandas para locales amplios que no generen molestias para los vecinos para "el desarrollo de eventos musicales". También, en este último apartado, se habla de la creación de "locales de ensayo".
Sin embargo, a pesar de esta lista de buenas y muy diversas intenciones, la propuesta del tripartito para Europa también detalla que la última decisión se tomará después de un proceso participativo, que es, precisamente, una de las partidas subvencionadas por los fondos europeos Dusi, con 60.000 euros.
Más allá del catálogo de posibilidades esbozado muy sintéticamente por el tripartito, y de lo que pueda salir del proceso de participación, los socios del gobierno local tampoco parecen haberse puesto de acuerdo en diseñar un plan específico para los 120.000 metros cuadrados del recinto de La Vega y los 26 edificios, que incluyen naves como la de Sánchez del Río, la destinada en su día a almacén levantada sobre los restos del claustro barroco del convento o la capilla de Santa Bárbara que incorpora dos portadas románicas de la primitiva Santa María de la Vega.
En sus respectivos programas electorales con los que concurrieron a las elecciones en 2015, el partido socialista es el que más desarrolla sus planes para La Vega. Como Wenceslao López ha declarado en varias ocasiones, sus planes pasan por un parque tecnológico centrado en el sector biotecnológico. En el programa del PSOE se habla de estudiar cada uno de sus naves, tratar de mantener la unidad e inspirarse en "la vieja actividad industrial" para los nuevos usos. Y cita, con referencia expresa a la proximidad del HUCA y la Fundación para la Investigación Biosanitaria de Asturias (FINBA), "la investigación y la innovación, la biotecnología, vivero de empresas, servicios especializados...". La conclusión es desplegar allí un "parque científico-tecnológico" vinculado a la Universidad y a la empresa donde, citan, "se fabriquen herramientas para producir software para móviles, i-pod, tablets, web, comercio o similares".
El PSOE, además, no rechaza la posibilidad de buscar al norte de la parcela terrenos libres para planear edificaciones en altura cuyas plusvalías financien el desarrollo urbanístico
En el programa de IU, sin tanto detalle, se recuerda la importancia que tuvo la fábrica y se pide, en primer lugar, que los chalets (hoy en día ya separados físicamente por Defensa del resto del recinto) sean rehabilitados y "puestos a disposición de las necesidades sociales de la ciudadanía y de entidades que le otorguen un uso colectivo". Además de esta propuesta, parecida a otra realizada por Somos, aunque dirigida a que fueran residencias de artistas, IU pedía recuperar "su naturaleza industrial" y señalaba la necesidad de "atraer e implantar en las naves actividad ligada al desarrollo tecnológico e industrial".
