"El deporte no es cultura, ni falta que le hace, tiene suficientes virtudes como para ser imprescindible en cualquier sociedad y, desde luego, no es la manera de llegar a conocerte a ti mismo". Con esa rotundidad se expresó ayer Sharon Calderón, aficionada al atletismo y licenciada en Filosofía, que ha llegado a practicar triatlón, pero no por ello se considera triatleta.

Ésa fue una de las cosas que Calderón aclaró durante la mesa redonda que, con el objetivo de desentrañar las relaciones entre la cultura y el deporte, tuvo lugar en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA, bajo el auspicio de Tribuna Ciudadana.

Virginia Gil, directiva de la asociación, moderó el debate en el que Andrés Llavona Fernández, antropólogo y director del Área de Deportes y Salud de la Universidad de Oviedo, lamentó la "mercantilización" del deporte que comenzó en el siglo XX y que prosigue con fuerza en nuestros días. "El espíritu deportivo se ha ido perdiendo; pienso que eran más puras las justas medievales que servían de entrenamiento para la guerra que muchas de las actividades que se realizan ahora".

Andrés Llavona alabó la inteligencia de los ingleses, que en el siglo XIX comenzaron a organizar y poner normas a muchas actividades ligadas, incluso, al pastoreo, como el caso del golf, que parte del sistema que los pastores escoceses tenían para controlar a las ovejas. "Se puede dirigir a las masas usando el deporte como excusa; debemos pasar del mercantilismo imperante a la unión del deporte con la salud, dos conceptos que deben ir siempre de la mano", agregó. A continuación, Alberto Suárez Laso, atleta paralímpico, de Riosa, ganador de una medalla de plata en las olimpiadas de Río de Janeiro, también estimó que el "deporte y la cultura deben ir de la mano".

También reivindicó más espacio para disciplinas a las que no se les suele prestar demasiada atención. "No es lógico que en la televisión sólo se hable de fútbol y se desprecie todo lo demás", recalcó.

Marcos Peón, atleta, especialista en los 3.000 obstáculos, matemático y reconocido entrenador, estimó que el "deporte y la cultura son dos mundos que se entrelazan".

Además, aseguró que en estos momentos "asistimos a una sobrevaloración de todo lo que rodea al deporte".