El humo generado, ayer por la mañana, por la rotura de un tubo fluorescente provocó la alarma en la Escuela de Ingeniería Informática, situada en la calle de Valdés Salas, y obligó al desalojo del edificio, donde se estaba llevando a cabo un campus científico en el que participan alumnos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO).

En un primer momento, se pensó que podría tratarse de un incendio, debido al olor a quemado y a que saltaron las alarmas de incendios. Tras el desalojo se comprobaron todas las instalaciones y se determinó que la causa del humo y del olor se debía a un fluorescente que había estallado en la planta baja del edificio.

Poco tiempo después, profesores y alumnos pudieron regresar a sus clases, quedando todo en un susto. Según fuentes consultadas por este periódico, se procedió al desalojo del edificio únicamente por prevención, ya que se trata de un inmueble muy concurrido durante estos días con motivo del III Campus Tecnológico-Deportivo de la Universidad, dirigido a potenciar el interés de los estudiantes en los campos informáticos y las actividades deportivas.