A falta de poco más de 24 horas para el comienzo de las fiestas de Trubia, los organizadores de los festejos que se prolongarán hasta el lunes todavía carecen de licencia. Así lo aseguraron a este diario ayer los miembros de la Sociedad de Festejos de Trubia (Sofetru), que el año pasado recuperaron la celebración desaparecida en 2015 y reconocen mantener la ilusión a pesar de los exigentes requisitos y los retrasos en las tramitaciones.

Miembros de Sofetru presentaron hace un mes la solicitud para celebrar las fiestas. "Se pone como tope 30 días antes para comenzar a tramitar, así que no queda otra", señala el presidente Juan García que, no obstante, sostiene que la premura y previsión no es razón suficiente para no permanecer en vilo hasta las horas previas a los festejos. "Ayer (por el martes) nos encontramos con que hay que subsanar la documentación", explica García, que se queja por el escaso margen de maniobra que se les deja para posibles problemas. "Piden unos planos y por tanto estoy a expensas de un aparejador que tiene que dejar su trabajo normal para atenderme", añade.

Los recientes problemas existentes tanto en las fiestas de San Juan de La Corredoria por la demora de la licencia como para las fiestas de San Pablo de La Argañosa, donde la celebración fue suspendida el primer día al no tener siete barracas los papeles en regla, han puesto en alerta a estos vecinos de Trubia que, de todos modos, dicen ya tener experiencia en estas incertidumbres. "El año pasado ya no recibimos la licencia hasta última hora", indican para luego puntualizar que descartan tener problemas con las atracciones. "Hemos analizado la documentación de todos y sólo tuvimos que darle la vuelta a uno", declaran.

Los vecinos que participan en la preparación de las fiestas se quejan de que a pesar de sus esfuerzos se les culpe de todos los retrasos. "Exigen mucho y dan muy poco", declara García, que tras las peripecias para obtener la licencia lamenta la rigidez con la que se limita el horario de las fiestas y se encarecen los costes de la fiesta con gastos como el pago exigido por la SGAE.

Como ya hicieran otras comisiones de Festejos días atrás en LA NUEVA ESPAÑA, la sociedad de Trubia apunta directamente a la tramitación telemática como uno de sus principales quebraderos de cabeza. "Somos gente joven, pero nueva en esto, y hay procedimientos que por su complejidad se nos hacen muy cuesta arriba", subrayan.

Sobre las causas de tanta demora, los propios trabajadores municipales reconocen que se debe a la elevada carga de trabajo, unida a la escasez de personal y agravada por la llegada de la época estival. "Mucha gente se va de vacaciones y su trabajo no lo asume nadie porque el de al lado bastante tiene con los suyo", indican fuentes de la propia plantilla que reconocen que en ocasiones se hacen excepciones para atender urgencias como es el caso de la tramitación de licencias de fiestas que comienzan de manera inminente. Todo apunta a que los retrasos se podrían repetir de manera constante en las diferentes verbenas programadas a lo largo del verano en todos los barrios.