"Es una cosa extraña eso de estar encerrado en una habitación con el director y jugar a ver un mundo que solo está en tu mente". El guionista avilesino Jorge Guerricaechevarría lleva más de 20 años imaginando historias y dándoles forma con grandes figuras del cine como Pedro Almodóvar o Álex de la Iglesia. Su trabajo para la película carcelaria "Celda 211" (2009) le valió un "Goya" y hablará sobre ella y toda su trayectoria en el coloquio que abre hoy, a las 20.00 horas, el ciclo de cine al aire libre de Bueño. En la charla participan también el periodista Edu Galán, el licenciado en guión Mario Suárez y el productor Juan Gona. Después se proyectará "Celda 211" en la plaza del pueblo.
- ¿Cómo se consigue una buena historia?
-Si supiera el secreto? Es difícil. Tiene muchos elementos y los más importantes son una buena trama y unos personajes que te empujen a seguirles.
- ¿Cómo Malamadre, de "Celda 211"?
-Ese es un buen ejemplo. Con un personaje así de potente es mucho más fácil que el espectador quiera enterarse de todo lo que le está pasando.
- ¿Son los guionistas los grandes olvidados?
-Es parte de nuestra condición. Tienes que estar ahí detrás y ser un poco invisible. Los que tienen que hablar son los personajes y no es bueno que se vea la mano del guionista. El reconocimiento que creo que debemos tener los profesionales es un sueldo proporcional a la tarea y tener consideración dentro de la profesión en esos términos.
- ¿Recibir un Goya añade presión?
-Si lo hubiese recibido al principio de mi carrera quizá lo hubiera tomado de otra manera pero cuando me lo dieron ya tenía mucho camino hecho. Es placentero contar con el reconocimiento pero sabes que al día siguiente tienes que sentarte frente a otra página en blanco y llenarla de personajes y de historias.
- ¿Es "Celda 211" su mejor guión?
-No, no lo considero mi mejor guión. Pero es complicado comparar historias. Ayuda tener un actor como Luis Tosar que haga un personaje tan bueno como Malamadre -de "Celda 211"- o un gran director. No se cuál es mi mejor guión, siempre presto toda mi atención a la película en la que estoy trabajando.
- ¿Es complicado convertirlo en una forma de vida?
-Llevo más de dos décadas comiendo y cenando del guión, pero no es algo muy común. Ahora, con las series de televisión, han hecho que haya un gremio que vive de ello de forma digna. Pero en el cine no hay tanta gente que puede vivir de ello.
- ¿Qué película imagina para Bueño?
-Muchas historias. Pero quiero imaginar una comedia muy divertida con personajes pegados a la tierra. Tipo a las irlandesas, con muchos personajes y muy coral.
- ¿Alguna vez ha pensado en dirigir?
-Me lo han ofrecido muchas veces pero no me atrae y no creo tener las características para ser un buen director. Ellos tienen la capacidad de convivir con la historia año y medio y yo, cuando acabo el guión, me siento liberado. También he tenido la suerte de trabajar con buenos profesionales, que no me han hecho tener esa necesidad de plantearme dirigir yo mismo la obra porque lo que sale en pantalla sea totalmente diferente a lo que yo había imaginado.
