Los juzgados siguen dando respuesta a las demandas individuales presentadas por los trabajadores despedidos de la Fábrica de Armas de Trubia, que comenzaron a llevar sus casos a los tribunales por separado después de que el Supremo respaldase el mes pasado el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que llevó a cabo Santa Bárbara Sistemas en 2013 y que significó la extinción de 55 contratos en la factoría de Trubia. El Juzgado de lo Social número 6 de Oviedo ha declarado improcedentes tres de los despidos, reclamados por los servicios jurídicos de CC OO.

Tal y como explicó el sindicato a través de un comunicado, las sentencias argumentan que "la empresa no justificó suficientemente la aplicación de los criterios fijados para determinar al personal afectado por el ERE" para dar la razón a los reclamantes. En el último mes, los tribunales han anulado cuatro despidos y dado validez, al menos, a otros tres más. En todos los casos, el juez encargado de emitir el fallo estudió si la empresa había aplicado de forma correcta las pautas que marcó para determinar los contratos de que trabajadores extinguirían. Entre las pautas que marcaban sus decisiones se encontraban, por ejemplo, si los operarios tenían hijos en edad escolar o si su pareja tenía trabajo. "Estas sentencias demuestran lo arbitrario de la medida aplicada y que se causó un sufrimiento innecesario a trabajadores para los que podría haber otras alternativas", criticó ayer la sección de Industria de CC OO en su comunicado.