El concejal de Cultura y Festejos, Roberto Sánchez Ramos, aseguró esta mañana que "Oviedo tendrá que crear seguramente una empresa pública para organizar las fiestas", después de admitir la existencia de un informe técnico que advierte que la SOF no tiene capacidad jurídica para gestionar adjudicaciones y otros aspectos relacionados con celebraciones como San Mateo.

Sánchez Ramos, que además es presidente de la SOF, anunció previamente que la junta de gobierno aprobó los pliegos para la adjudicación de los cuatro chiringuitos repartidos entre la Corrada del Obispo y el Campillín, así como las 14 casetas de hostelería que ya el año pasado se instalaron en el paseo del Bombé.

Un primer trámite que hasta ahora hacía la SOF, pero que ahora pasará a realizarse desde el Ayuntamiento y abre camino a una gestión integral de las fiestas desde el Consistorio. "Nos damos un plazo de unos meses para garantizar una nueva fórmula pública de la gestión de las fiestas", apuntó el concejal, que no descarta copiar de los modelos de otras ciudades. "Divertia en Gijón y otras empresas pueden ser un punto de partida para garantizar unos festejos públicos", indicó.

Por otro lado, recordó que fueron unas leyes impulsadas por el PP en el año 2011 las que impiden a la SOF realizar legalmente varios procedimientos que hasta entonces sí podía realizar como adjudicaciones o temas de ocupación del suelo municipal. Del mismo modo, denunció que el PP no hizo nada desde entonces, pero las fiestas se continuaron desarrollando con normalidad "porque había un consenso de 25 años con las fiestas de todos los grupos" y acusó a los populares de ser "la escuela del miedo" y querer "judicializar la política" con medidas como la denuncia del pasado año sobre la adjudicación de los chiringuitos nuevos que, pese a no prosperar, puso en tela de juicio la capacidad de la SOF para convocar ese tipo de concursos.