La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Oviedo encargó ayer la organización y gestión del programa de las fiestas de San Mateo a la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF), a pesar de la existencia de un informe del secretario municipal que califica de "no conforme a derecho" el convenio suscrito por las partes para desarrollar las celebraciones. El equipo de Gobierno decidió ayer asumir directamente la adjudicación de los nuevos chiringuitos y casetas del Bombé, incluidos como novedad el año pasado y motivo de una denuncia del PP. Pero el resto de la programación seguirá este año, por última vez, "al amparo del régimen consolidado hasta el año 2015", reza el acuerdo alcanzado ayer.
La SOF se hará cargo del grueso, y para justificar la decisión con un informe en contra del secretario municipal la Junta de Gobierno introdujo ayer en su acuerdo que la decisión se adopta "por el interés general" y "a razón de la proximidad de las fiestas".
El informe encargado en enero por el propio presidente de la SOF y concejal de Festejos, Roberto Sánchez Ramos, concluye que el encargo que el Ayuntamiento hace a la sociedad mediante un convenio anual de colaboración "no es conforme a derecho", teniendo en cuenta una modificación legislativa del año 2013 y por ello sugiere que "deben buscarse fórmulas legales alternativas para la gestión de las competencias municipales en materia de fiestas".
A la vista de dicho documento, los grupos que conforman el tripartito (PSOE, Somos e IU) plantearon ayer en una Junta de Gobierno de casi tres horas la necesidad de buscar un acuerdo que permitiese cumplir con las recomendaciones del secretario sin poner en peligro las fiestas. Si bien se admitió la necesidad de denunciar el convenio con la SOF que cada año se viene renovando desde 1997, Alcaldía llevó una propuesta que, aunque no acata las recomendaciones del secretario de manera inmediata, busca una solución intermedia y aplaza la definitiva al próximo año.
Concretamente, se acordó mantener el convenio de este año con la sociedad "por el interés general" y teniendo en cuenta que la anulación de las contrataciones y gestiones ya realizadas por la SOF podría conllevar responsabilidades patrimoniales, como también advirtió ayer el secretario municipal. Así que, si se cumple el acuerdo alcanzado ayer, las de este año serán las últimas fiestas organizadas por la SOF. Y como adelanto, y para evitar nuevas denuncias, las adjudicaciones de nuevos chiringuitos y casetas del Bombé ya no las hará la Sociedad de Festejos. En el acuerdo alcanzado ayer, la Junta de Gobierno se compromete a denunciar el convenio con la SOF con fecha de 1 de enero de 2018 y con el compromiso de "definir y desarrollar" un nuevo modelo de "gestión directa" .
En lo que respecta a este nuevo modelo, Sánchez Ramos apuntó a la posibilidad de que el Consistorio constituya un nuevo ente municipal. "Oviedo tendrá que dar un paso a crear seguramente una empresa pública que gestione determinadas actividades que hoy ya no se pueden hacer como se hacían por cambios del PP en la ley", declaró. Otros socios del equipo de gobierno también se refirieron a "una empresa municipal de servicio de espectro amplio" para gestionar Festejos y Cultura, lo que equivaldría, en su caso, a la desaparición de la Fundación Municipal de Cultura. "El caso de Divertia en Gijón y otras empresas pueden ser un punto de referencia la hora de lograr unos festejos públicos", apuntó Sánchez Ramos.
Por otro lado, el presidente de la SOF acusó al PP de "romper el consenso" de todos los grupos sobre las fiestas tras perder las elecciones y "querer llegar judicialmente a donde no llegan los votos". Igualmente, criticó que en 2013 y 2014 los populares adjudicasen "digitalmente" los chiringuitos de "Gastromateo" a la patronal Otea y sus socios.
