El candasín Pipo Prendes llenó con sus habaneras el claustro del edificio histórico de la Universidad. Más de 300 personas, ni una silla libre, acudieron a la cita con el cantautor, que regresaba a Oviedo tras cinco años de ausencia. El concierto comenzó entre aplausos con "Posada Jamaica". Prendes dijo sentirse "realmente encantado de estar en un sitio tan fantástico" como el claustro de la antigua Universidad y agradeció al ayuntamiento que promueva "la cultura y el arte en la ciudad". Además de sus canciones de toda la vida, como "Bailando en México" o "Un paso más", compuesta mientras paseaba de Candás a Perlora, también aprovechó para estrenar "Ha llegado la hora", contra la violencia de género; "La libertad contigo", contra las drogas y, por último, "A nuestra edad".

Ya al final, Pipo Prendes pidió la colaboración del público para cantar el estribillo de "Viajera". Para cerrar la actuación escogió "Quizás, quizás, quizás", que el público coreó animadamente.