Un total de ocho de los 21 elementos romanos y medievales, principalmente lápidas y estelas, que la Consejería de Cultura del Principado quiere blindar forman parte del Tabularium Artis Asturiensis, localizado en Oviedo. Una colección privada que impulsó el que fuera cronista de Asturias, Joaquín Manzanares, y que está considerada como uno de los principales conjuntos arqueológicos de carácter privado de España.
Francisco Manzanares, director del Tabularium, se muestra conforme con que se aplique esta protección a las piezas, algo que considera que debería de haberse hecho hace décadas. "No me parece mal, el inventario se tenía que haber hecho hace cuarenta años, eso es lo que hizo el Tabularium: inventariar", asegura Manzanares, al que la controversia ha cogido fuera de España. "Se vendió todo lo que se quiso y más, y nadie hizo nada. No me parece mal que haya ventas, porque es una propiedad privada, pero hay leyes que regulan cómo se hacen las ventas", añade.
El hijo de Joaquín Manzanares reivindica además la transparencia con la que siempre ha actuado el Tabularium, que trasladó a la administración un listado con todas las piezas de la colección: "Si saben que hay ocho, y de que ocho se tratan, es porque están inventariadas. Mi padre entregó una lista con todas las piezas importantes al Principado hace más de treinta años".
Francisco Manzanares reclama, eso sí, que esta medida se aplique a todos los propietarios, sin hacer distinciones, y de una manera rigurosa: "Que lo inventaríen todo, no lo de unos sí y lo de otros no. Si se hace un inventario se hace en serio, se tenía que haber hecho ya, con participación de la Universidad".
La actuación del Principado pasa por otorgar a estos 21 elementos la categoría de patrimonio singular e incluirlas en el Inventario de Patrimonio Cultural de Asturias (IPCA). Una medida con la que se lograría un doble objetivo: dotar a estos elementos de una protección legal de la que ahora carecen y, al tiempo, evitar una eventual salida de la región mediante una venta de sus actuales dueños. Porque todos esos elementos son de propiedad privada.
El grueso de las piezas que se prevé blindar se custodia en el Tabularium Artis Asturiensis. En concreto, son ocho elementos, que Joaquín Manzanares localizó y recuperó por todo el territorio regional: Lápida dedicada a Reo Pecio Parameco (encontrada en El Collado, Riosa), Lápida dedicada a Augusto del Cabo Torres (Gijón), Estela dedicada a Vianeglo (Castandiello, Morcín), Estela antropomorfa de Selorio (Villaviciosa), Estela discoidea anepígrafa de Aller, Epitafio de Félix (Iglesia de Santa Eulalia de Morcín), Lápida dedicada a Iustus (Iglesia de Santa Eulalia de Morcín) y una campana del monasterio de Corias. Ninguno otro de los propietarios afectados por la medida, incluido el Arzobispado de Oviedo, tiene más de dos piezas.
