La jueza del número 3 de Oviedo acaba de decretar la apertura de juicio oral por supuestos contratos irregulares en el servicio de prensa municipal del Ayuntamiento de Oviedo, con los responsables de la empresa Asac y los jefes de prensa y de modernización del Ayuntamiento como imputados.

La fiscalía solicita cinco años de prisión y nueve de inhabilitación para Rodolfo Sánchez, el jefe de prensa del Ayuntamiento, que estuvo de forma efectiva en el cargo en los anteriores mandatos del PP, y para el jefe de modernización, Ignacio Huerta.

Para los responsables de la empresa Asac, con la que se realizaron los contratos a dos periodistas, supuestamente de forma irregular, la fiscalía pide tres años de prisión y seis de inhabilitación. Maximino Fernández, imputado en este proceso junto a Marco Antonio Prieto, fue condenado la semana pasada a un año y nueve meses de prisión dentro del caso Marea.

A los jefes de prensa y modernización, la Fiscalía les imputa un delito continuado de prevaricación y de falsedad documental, igual que a los responsables de la empresa.

Aunque la causa la inició Foro Asturias, que ahora ha desistido del proceso, se mantiene Somos Oviedo como acusación particular, con una petición de diez años de inhabilitación y tres de prisión para los trabajadores municipales y de siete de inhabilitación y tres de prisión para los dueños de la empresa.

Dadas las pensas solicitadas de inhabilitación y al tratarse de personal que trabaja en la administración, el juicio pasará a la Audiencia provincial.

Los hechos denunciados se remontan al año 2013, en la etapa de Agustín Iglesias Caunedo en al alcaldía. La acusación sostiene que el entonces jefe de prensa, hoy apartado de forma oficiosa de su cargo, aunque sigue siendo jefe de este servicio con el tripartito pero sin ejercer las funciones, instigó la contratación de dos periodistas para enchufarlos en el Ayuntamiento de Oviedo. Los dos periodistas contratados se incluyeron dentro del contrato de los servicios informáticos que prestaba entonces y sigue prestando ahora Asac para reforzar las redes sociales. Su contratación se habría realizado, según los delitos delos que acusa la fiscalía a los trabajadores municipales, falseando documentos y con prevaricación. Uno de estos dos trabajadores dejó su puesto cuando el contrato se modificó en el año 2015. La otra persona sigue en la actualidad desarrollando las mismas tareas, también dentro del contrato de Asac para el Ayuntamiento de Oviedo.