El Bulevar de la Sidra, o, lo que es lo mismo, la calle Gascona, se convirtió ayer por la tarde en la gran pasarela del escanciado de sidra de Asturias. Estaban los mejores escanciadores de la región, que este año llegaron nada menos que a cuarenta y ocho; todo un récord de participación, frente a la treintena que asistieron a la cita del año anterior. Además, esta prueba es puntuable para el Campeonato de Asturias.

El jurado lo tuvo muy difícil en este XXIV Campeonato oficial de escanciadores. Tanto que con los dos primeros clasificados empatados a puntos, 117,50, al final optaron por medir el estilo. Resumiendo, resultó ganador Jorge Vargas, seguido del Salvador Ondón. Se da la casualidad de que ambos escancian en la sidrería gijonesa El Mallu. El tercer puesto fue para Pablo Álvarez, de la sidrería Alberto, de Oviedo.

Dentro del apartado de los escanciadores locales, enmarcado también en este campeonato, el primer premio fue para Mateo Turcu, un rumano enamorado de la sidra que la echa en el restaurante ovetense El Campanu.

Después les tocó el turno a los camareros que trabajan en las sidrerías de la calle Gascona, que participaron en el XVI Concurso de esta categoría. La mayoría también había competido en la edición pasada. El ganador fue Emiliano Álvarez, de Tierra Astur Parrilla.

Al final todos los ganadores escanciaron para el animoso público que asistió al evento sidrero aguantando un auténtico chaparrón.

Después, llegó la música. Y nada menos que de la mano de "Cum Laude", un incombustible grupo liderado por el polifacético Laude, mezcla genial de humorista y cantante que estuvo acompañado a la guitarra por Andrés Llavona, profesor y responsable de la Universidad del área de Deportes. El "Fonta", de San Claudio, también lo dio todo, igual que Chus, que dejó su tarea golfística en el campo de Las Caldas para subirse al escenario.

Llovía, y mucho, pero los animados espectadores abrieron sus paraguas y siguieron la alegre actuación, en la que un grupo de niños fue también protagonista. Los músicos los animaron a subir al escenario y, a cantar.