Hubo, como principal y exitosa novedad, varias chirigotas de Cádiz, pero también sones cubanos, bailarinas de samba brasileña, corridos mexicanos, mapalé colombiano, ritmos ecuatorianos y gaita, mucha gaita. El desfile del Día de América en Asturias estalló ayer en un multitudinario carnaval que llenó de música y color las calles de Oviedo y en el que, contra lo sucedido desde el mismo arranque de San Mateo, solo llovió confeti. La hasta ahora adversa meteorología se sumó a la fiesta y dejó una magnífica tarde para celebrar el gran homenaje a la emigración asturiana y a sus países de acogida. La cita ideada por Alfonso Iglesias cumplió 67 años en plena forma, con once carrozas, 31 pasos y alrededor de tres mil figurantes en la marcha. Las calles, auténticos hormigueros de gente.

Que Oviedo tenía ganas de ver el sol y de disfrutar de una de sus jornadas festivas más emblemáticas quedó bien claro desde una hora antes del inicio del desfile, que partió puntual, a las cinco de la tarde, de la calle Independencia. Los vendedores de confeti no tardaron en hacer su agosto en pleno septiembre y en las sillas instaladas en la calle Uría no cabía ni un alfiler cuando las banderas de Estados Unidos, Cuba y México abrieron la marcha, portadas por varias personas ataviadas con el traje regional asturiano. Fue el homenaje de Oviedo a sus ciudades hermanas que acaban de sufrir los efectos del huracán "Irma": la estadounidense Tampa, la mexicana Veracruz y la cubana Santa Clara.

Tampoco fue casual que la Banda de Música Ciudad de Oviedo fuera la primera agrupación del desfile, ya que este año celebra los 25 años de su fundación. Idéntico aniversario festeja la Real Banda de Gaitas de la ciudad, que cerró la marcha a bordo de una monumental carroza y con su director, José Manuel Fernández Gutiérrez ("Guti"), dirigiendo a decenas de instrumentistas.

En un guiño a la tradición, también ocuparon los puestos de inicio del desfile unos aclamados Pinón y Telva, pendientes de su sobrino Pinín, quien, en esta ocasión, optó por dejar el madreñogiro en el pueblo. "Cuanta xente, Pinón, cuanta xente", exclamó Telva, con asombro, nada más enfilar la calle Uría.

La primera carroza del desfile fue una espectacular recreación histórica del Fontán, a cargo de la asociación Mercáu Astur. "Ha salido El Carbayón, ha salido El Carbayón", anunciaba un pequeño vendedor de periódicos de principios del siglo XX.

Una carroza de treinta metros celebró los 125 años del Campoamor

"¡Que vienen los Reyes Magos, que vienen los Reyes Magos!", alertó con entusiasmo Miguel, un niño de corta edad algo despistado, al ver aparecer en lontananza la carroza con la que la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF) rindió homenaje al teatro Campoamor en su 125º aniversario. Y es que el espectacular montaje, de 30 metros de largo y ocho de alto, representaba la boda de la zarzuela "Maharajá", con los cantantes ataviados con turbantes y trajes orientales. De ahí la confusión de Miguel, que tendrá que esperar unos meses para ver cumplido su real deseo.

Las miles de personas que atestaron las calles del centro de la ciudad se lo pasaron en grande con las agrupaciones del carnaval gaditano que supusieron la principal novedad del desfile. La comparsa "Los irracionales", la chirigota "Los del planeta rojo, pero rojo rojo", el coro "El mayor espectáculo del mundo" y el cuarteto "Lo que el viento se llevó" se ganaron al público a base de calidad musical, humor y simpatía, en una carroza que reproducía el popular teatro Falla de su ciudad. Hoy actuarán en varios puntos de Oviedo, entre ellos la plaza de la Catedral (12.30 horas) y La Escandalera (19.00 horas).

"Estamos encantados con este gran ambiente. Además, Oviedo es muy bonita, en eso se parece a Cádiz", comentó en pleno desfile Sergio Gallardo, integrante de la chirigota y ataviado con un traje a medio camino entre el de un extraterrestre y ese chandal con los colores venezolanos que es tendencia entre cualquier dirigente chavista que se precie. Por cierto, "Lo que el viento se llevó" estrenó en Oviedo un tema dedicado al piloto Fernando Alonso.

En esa canción, el cuarteto repasa buena parte de los triunfos de Alonso, pero reconoce que el mayor de todos ellos es haber logrado que los gaditanos madrugasen los domingos para ver sus carreras.

La delegación andaluza está en Oviedo acompañada por Laura Jiménez, concejal de Turismo del Gobierno municipal que preside José María González ("Kichi"). Fue recibida oficialmente por la mañana en el Campoamor por la teniente de alcalde, Ana Taboada (Somos), y el concejal de Cultura y presidente de la SOF, Roberto Sánchez Ramos (IU). En el acto, Vicente Prado ("El pravianu") interpretó a la gaita tanguillos de Cádiz. "Estamos muy contentos de estar en Oviedo y de promocionar aquí nuestros carnavales", subrayó Jiménez, que siguió el desfile acompañada por el alcalde Wenceslao López, y numerosos ediles de la Corporación. Llamó la atención que la representación del PP en la zona reservada para autoridades se limitara al concejal José Ramón Pando.

"El pravianu" no solo fue protagonista en el acto de la mañana, ya que presidió una carroza de homenaje al tradicional instrumento astur y al gaitero de Libardón. Además, en la marcha, cuya estructura se descompuso de forma notable desde Marqués de Santa Cruz hasta su conclusión en la calle Asturias, también hubo carrozas y grupos folclóricos de la comunidad ecuatoriana, Valdesoto, Perú, México, Cuba o Brasil; bandas de gaitas como las de El Llacín (Llanes) o "Villa de Xixón"; una representación de emigrantes de Tineo, y bailarines de New Orleans llegados de Luarca. Tampoco faltó Mateín, que recorrió las calles de la ciudad a bordo de un "haiga".