La joven de 19 años que dijo haber sido forzada durante las primeras horas de la mañana del último domingo de San Mateo no sufrió ningún tipo de agresión sexual. Esas son las conclusiones de la Policía Nacional, que ha dado por terminadas las investigaciones iniciadas a raíz del testimonio inicial de la chica después de tomarle declaración. "Tras los correspondientes análisis medico forenses y la toma de declaración, tanto a la presunta víctima como a su entorno, los agentes policiales encargados de la investigación han concluido que la agresión sexual no ha existido", explica la Policía a través de un escueto comunicado. Fuentes consultadas por este diario aseguran que el caso se dio por cerrado porque la propia chica admitió el lunes en comisaría que no había sido forzada.

Los agentes de la Policía Local que atendieron inicialmente a la joven dijeron desde un principio que sus declaraciones fueron "confusas". Siempre según fuentes del cuerpo municipal, la chica les habría dicho a los policías que la ayudaron que había sufrido una agresión sexual alrededor de las siete y media de la mañana del domingo en una zona ajardinada situada en el entorno del número 3 de la calle Regla, muy cerca de la zona de movida del Antiguo. También les dijo, según las mismas fuentes, que el ataque había sido obra de "varios hombres". Aunque la joven llegó a llamar al telefonillo de una vecina de la zona para pedir ayuda, al llegar la Policía no supo describir a los supuestos agresores ni ofreció un relato coherente de los hechos. Entre otras cosas, llegó a declarar a los agentes que se quedó dormida al haber consumido alcohol y que se dio cuenta de que había sido forzada al despertarse.

A los policías municipales les dijo que había sido atacada y activaron de inmediato el protocolo que se pone en marcha en casos de violación. Llevaron a la joven al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) para que se le hicieran las pruebas médicas forenses pertinentes y a continuación la trasladaron a las dependencias de la Policía Nacional, el cuerpo que se encarga de investigar este tipo de sucesos. Los agentes que la recibieron consideraron que en aquel momento la chica no estaba en las mejores condiciones para declarar y decidieron posponer el interrogatorio para el día siguiente.

La chica se fue a casa, pero para entonces ya habían saltado todas las alarmas. A mediodía del domingo, durante la romería del Cristo que se celebró en el parque del Truébano, el alcalde de la ciudad denunció los hechos ante la prensa. El socialista Wenceslao López no quiso entrar en detalles "para no entorpecer la investigación", pero se refirió al caso como "un hecho grave" que enturbia las fiestas de San Mateo. El regidor subrayó que "es difícil en estos tiempos impedir esas agresiones que degradan la condición humana" e hizo un llamamiento a la prudencia para "preservar la eficacia de la intervención policial y tratar de conseguir coger a los culpables".

Ayer, una vez conocidas las conclusiones de la Policía Nacional, Wenceslao López explicó su reacción del pasado domingo, que fue criticada incluso por su socia de Gobierno Ana Taboada (Somos). "No creo que me haya precipitado. Cuando yo informé ya habían pasado cinco horas de los hechos y la noticia estaba en la calle. Sabía que algún medio tenía la información y lo lógico era pedir prudencia. No obstante, nos hemos librado de un hecho deleznable y parece una buena noticia para Oviedo", dijo.