La polémica a cuenta del Auditorio Príncipe Felipe y las carencias de seguridad contra incendios que se detallan en varios informes municipales también sobrevoló ayer sobre los actos de la fiesta del Pilar celebrados en el cuartel del Rubín. El delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, elogió al que fue uno de los grandes proyectos de su mandato municipal, mientras que el alcalde, Wenceslao López, subrayó que las deficiencias ya existían cuando se inauguró el recinto de la plaza del Fresno

"Ese auditorio es una maravilla, el proyecto tiene 20 años y lleva 18 años funcionando. Algunas cosas hay que adaptarlas a la normativa actual. Cuando se hizo no había estas bombillas que hay ahora de luz fría. Cámbienlas, porque hace veinte años no las había", indicó De Lorenzo. "Adaptemos el Auditorio a la normativa actual, sin alarmas, sin encargar informes fuera. Tienen unos funcionarios que estuve 25 años allí con ellos y hay que posarles la boina. ¿Por qué tenemos que estar encargando siempre informes fuera, sean jurídicos, técnicos, urbanísticos, arquitectónicos? Hay que mirar un poco más por los intereses económicos de la ciudad. Si sobra el dinero, bájense los impuestos, pero no se gasten en repartos de este tipo", añadió el Delegado.

Los informes

Wenceslao López, por su lado, se reconoció sorprendido por las palabras de De Lorenzo. "Que diga Gabino eso, cuando estamos pagando 30 millones por pufos que ha dejado él?", dijo. Y negó la mayor. "Los informes dicen que las deficiencias ya existían cuando se construyó, parece claro que hay defectos y carencias en el momento de la construcción y que no se aplicó la legislación", aseguró.

Ahora, añadió López, le resta hacer que el Auditorio funcione con la máxima seguridad, y "tratar de determinar posibles responsabilidades, otro asunto complejo, porque el asunto viene de hace veinte años". Y es que "los fondos públicos son sagrados", remachó.

De momento, y pese a los informes que alertan de que el Auditorio no es seguro en caso de que se produzca un incendio, la programación en el equipamiento se mantiene, aunque con algunas medidas extraordinarias. La más llamativa es que el concierto de gala de la Fundación Princesa de Asturias tendrá lugar el día 19 con una reducción de 500 personas en el aforo inicialmente previsto, ya que no se abrirá la sala polivalente para este recital.