La Sociedad Filarmónica de Oviedo cumple 11 temporadas. La de este año comenzó el pasado miércoles con un recital del chelista asturiano Gabriel Ureña que interpretó, acompañado del pianista Patxi Aizpiri, música de Beethoven, Brahms, Robert Schumann y Prokofiev. La Sociedad Filarmónica de Oviedo, presidida por Jaime Álvarez- Buylla, pone especial empeño en promover a las jóvenes figuras de la música asturiana. La entidad, fundada en 1907, tiene como único fin la difusión de la música puramente instrumental. En la imagen, Ureña y Aizpiri durante el concierto.