En el ascensor de un céntrico hotel ovetense, Margarita Comas y Susi Valtueña se miraban ayer de reojo, pero sin atreverse a hablar. De pronto, las dos cayeron al mismo tiempo: "¡Pero si no nos veíamos desde mi boda, hace veinticinco años!". Después llegaron los besos y los recuerdos. Esta fue una historia de las muchas que se repitieron durante la primera reunión que celebraron unas sesenta personas que nacieron o pasaron su infancia en el edificio del Grupo Covadonga, en la Avenida de Galicia, entre los años 45 y 50 aproximadamente, del pasado siglo.

"Nacimos, nos criamos, jugábamos, compartíamos el mismo colegio; en definitiva, pasamos juntos unos años importantísimos de nuestra vida. Fuimos una gran familia durante muchos años, y ahora nos reencontramos por primera vez después de tanto tiempo", comentó Carmen Alonso.

Y el artífice de este singular encuentro fue Luis Alonso, conocido en Oviedo como "El Chuli", mote ganado a pulso cuando jugaba al fútbol en los Maristas, explicó entre risas.

Como vivió veinticuatro años en el Grupo Covadonga dice que siempre tuvo una especial querencia a este edificio, en el que hizo muchos amigos. "En una reunión de los que seguimos en contacto, decidimos organizar este primer encuentro. El resto lo hicieron las redes sociales", explicó Luis Alonso. Besos, abrazos, anécdotas pero, sobre todo, caras muy alegres como la de Miguel Ángel Fuente, alma de la Orden del Sabadiego. "Muchos no nos veíamos desde hace cuarenta años o más".

Al final decidieron poner nombre a este encuentro, el de "Los niños del Grupo Covadonga". Hasta el próximo año.