"Plan renove". El gobierno tripartito quiere superar el "modelo decimonónico de ciudad" heredado del PP de Gabino de Lorenzo. Para ello, prepara una renovación a fondo del mobiliario urbano que se sustanciará, fundamentalmente, en la instalación de 185 bancos con un diseño "práctico y eficiente", 225 papeleras y unas nuevas placas de identificación de calles que nada tendrán que ver con las que ahora están instaladas en la mayoría de arterias ovetenses. De manera paralela a esta iniciativa que lidera la Concejalía de Infraestructuras, a cuyo frente está la socialista Ana Rivas, el área de Urbanismo, dirigida por Ignacio Fernández del Páramo (Somos), ha cerrado ya, en colaboración estrecha con Cultura, una propuesta para actualizar la toponimia tradicional del concejo. Entre otras cosas, conllevará que la denominación Uviéu sea tan oficial como Oviedo.
Los nuevos bancos que irá instalando de manera progresiva el Ayuntamiento, con una inversión de casi 30.000 euros, se diferencian de los que hay ahora en la mayor parte de la ciudad en que tienen una mayor altura (45 frente a 30 centímetros) y en que, además, disponen de apoyabrazos. "Son mucho más cómodos para la gente mayor, que se podrá levantar y sentar con más facilidad", subraya Rivas.
El diseño de las 225 nuevas papeleras, algunas de ellas ya suministradas al Consistorio, es más similar a las que ya están puestas que en el caso de los bancos. Son metálicas y conservan el color verde, con escudo de Oviedo y dotadas de cenicero. Su coste alcanza los 75.000 euros.
Según Rivas, el Ayuntamiento llevaba años sin adquirir este tipo de mobiliario urbano, por lo que no podía hacer frente a la necesidad de reponer bancos o papeleras, ni tampoco a las peticiones vecinales para cubrir zonas que carecen de estos elementos. Aunque todavía no está cerrado donde se pondrá el nuevo mobiliario, la edil de Infraestructuras avanza que se irán colocando de acuerdo con las peticiones recibidas desde los distritos.
Además de bancos y papeleras, el Ayuntamiento también va a colocar un nuevo modelo de placas identificativas de calles, empezando por aquellas que están afectadas por la Ley de Memoria Histórica. Las del tripartito serán placas con un soporte en aluminio que va en la fachada y sobre el que se sitúa el marco que lleva dentro el rótulo con la denominación de la calle en cuestión. Se trata de un sistema similar al de los portafotos.
"La placa rotulada tendrá el fondo azul y las letras en blanco, todo ello reflectante y con el logo moderno del Ayuntamiento y la nueva imagen corporativa municipal", afirma Ana Rivas, quien anuncia que el tripartito va a contratar ya el diseño de las placas y las primeras unidades. La edil afirma que esta renovación es necesaria por cuanto, según apunta, las identificaciones que hay ahora "en la mayor parte de la ciudad apenas se leen y en muchos casos solo las hay al comienzo y al final de las calles". Además, Rivas subraya que, en el caso de que sufran algún acto vandálico, los nuevos modelos permiten cambiar únicamente la parte rotulada y que, además, cuentan con un vinilo que se limpia muy bien si hay pintadas.
La intención del tripartito, según Ana Rivas, es continuar con este proceso el año que viene, cuando está previsto renovar las fuentes de agua potable en parques infantiles del concejo. "Sin romper del todo con lo que hay, nuestro objetivo es cambiar la imagen decimonónica de la ciudad, que no es para nada la tradicional de Oviedo, con un modelo de mobiliario urbano que sea más práctico, eficiente y amigable", resume Ana Rivas sobre el proyecto.
Desde el punto de vista de la toponimia, la propuesta municipal para oficializar las denominaciones tradicionales de los núcleos de población incluye el término Oviedo/Uviéu, aunque el tripartito consultará a la Xunta Asesora de Toponimia del Principado sobre si sería recomendable incluir también en la relación la denominación Uvieo.
A nivel parroquial, lo que se plantea es la recuperación de los nombres tradicionales de muchas de ellas. Es el caso de Tudela, que deja de ser Agüeria que es un pueblo de Tudela; Veguín, que actualmente se llama Box; San Cloyo por San Claudio; Les Caldes y no Priorio, o Villaperi frente a Villaperez. Un caso llamativo es la propuesta de incluir una nueva parroquia en el municipio, La Paranza, con lo que se pasaría de 30 a 31 núcleos parroquiales. Este planteamiento se basa en que parte de los núcleos de esta parroquia que está situada en el concejo de Siero se ubican en el de Oviedo. Es decir, que los límites de los concejos no coinciden con los tradicionales de las parroquias, afirman en el tripartito.
A nivel de pueblos, explican fuentes del Consistorio, la propuesta municipal "incluye decenas de topónimos que no habían sido recogidos, a pesar de que algunos, aunque rurales, son ampliamente utilizados por todos los carbayones, como es el caso de El Requexón". Según los mismos portavoces del Consistorio, la mayor parte de los topónimos ya están siendo utilizados en su forma tradicional, por lo que solo será necesaria la doble denominación tradicional/castellano en casos muy puntuales, como, por ejemplo, Uviéu/ Oviedo. De esta forma, se apostará por la señalización tradicional y habitual para toda la señalíptica.
"Casi veinte años después, por fin empieza a cumplirse una ley autonómica aprobada por el PP y que, desde entonces, duerme el sueño de los justos. Uviéu recupera de esta forma su condición de capital de Asturies", afirma Ignacio del Páramo. Por su lado, Roberto Sánchez Ramos ("Rivi"), edil de Cultura, subraya que con estas medidas sobre toponimia "recuperamos la normalidad lingüista en Uviéu, que se reencuentra con sus señas de identidad asturianas. Ha costado casi dos décadas, pero por fin entramos en un proceso democrático de normalización".
Según el tripartito, Oviedo debería de haber sido, como capital, el primer concejo en cumplir la ley 1/98 que obliga a la denominación tradicional. "Esa ley fue aprobada por el PP hace 20 años pero a nivel municipal no la aplicó", añaden en el gobierno local.
