"Ya podíais haber venido ayer, que taba malo". En lo alto del Naranco, mientras los trabajadores del plan de empleo de este año se afanaban en desbrozar sendas y bromeaban sobre el buen tiempo, el concejal de Economía, Rubén Rosón, y la primera teniente de Alcaldía, Ana Taboada, presentaron ayer por la mañana el programa para el año que viene, que seguirá dedicándose en buena parte al monte ovetense. La propuesta para 2018, explicó ella, consiste en recuperar el arbolado de las "dolinas del Naranco", con la plantación de 3.000 árboles. A esta tarea se destinará un total de 27 trabajadores, mientras que otras ochenta personas se dedicarán a la adecuación de rutas, miradores, pistas específicas de running y demás equipamientos por toda la zona rural del municipio.

El grupo municipal de Somos, explicaron Taboada y Rosón, insiste así en su línea de "recuperación de un espacio natural ante el que vivíamos de espaldas". Ese proyecto incluyó la Jira de este año y los planes de empleo para abrir y recuperar rutas, y seguirá el próximo año con la reforestación y la adecuación de los caminos.

Taboada quiso dejar claro que el Ayuntamiento ya trabaja en fincas como el Pevidal pero que la parcela que corresponde al Principado sigue a la espera de unos presupuestos del gobierno regional que destinen dinero al monte Naranco, al Prerrománico y al espacio natural. Taboada reclamó una "partida económica digna" para prevenir y no lamentar lo que ha sucedido en otras zonas de Asturias con los incendios.