El Oviedo Baloncesto (OCB) aspira a subir a la máxima categoría de la disciplina en España, la ACB, pero estar arriba requiere disponer de un espacio acorde a la competición, algo que no cumple la sede actual del equipo de la ciudad, el polideportivo de Pumarín, el fortín de Pumarín, como se ha dado en llamar. Por eso, el Ayuntamiento está elaborando un proyecto para construir un nuevo pabellón en La Florida, en una parcela de 25.000 metros cuadrados.

Lo primero que se necesita es espacio para el público. La ACB exige que el recinto en el que se jueguen los partidos tenga capacidad para 5.600 espectadores. Pumarín ronda las 1.400 plazas con las gradas supletorias en la pista. En este punto, el proyecto del Ayuntamiento para La Florida dibuja 6.000 plazas.

Esa es la gran diferencia pero los requisitos de la Asociación de Clubes de Baloncesto van mucho más allá. Entre las peculiaridades del deporte de élite se fija que la instalación debe tener una sala de 40 metros cuadrados para realizar controles antidoping. También debe haber una sauna de 15 metros cuadrados y una sala de masaje de 10 metros cuadrados. Además de una enfermería de pista de 30 metros cuadrados.

Las autoridades que acudan a los partidos dispondrán de espacios propios. Tendrá que haber un graderío específico para las autoridades, que también deberán tener una sala propia para sus reuniones y unos aseos.

La prensa debe recibir, según los requisitos de la ACB y el Consejo Superior de Deportes, un trato similar al de las autoridades. Debe haber sala de prensa pero también aseos para los periodistas que tendrán graderíos específicos para prensa escrita, televisión y radio y reporteros gráficos. Eso sí, la sala de prensa debe tener 100 metros cuadrados y la de autoridades vale con que tenga 60 metros cuadrados.

Espectáculos

El los primeros documentos que ha elaborado el Ayuntamiento respecto a este proyecto se incluyen además las necesidades de "espacios auxiliares singulares" que se ajusten al Reglamento General de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas.

El consistorio quiere aprovechar el recinto para celebrar conciertos para 5.000 espectadores, algo que ahora mismo es impensable en la ciudad fuera de las fiestas de San Mateo.

Así, el proyecto contempla que la grada de todo el pabellón permita tanto circulaciones verticales, por escaleras, como horizontales, por pasillos. Además se deben habilitar vías de acceso desde la calle.

En este apartado se incluye también la existencia de un bar-cafetería de 85 metros cuadrados que dispondrá de una cocina-almacén de 25 metros cuadrados. En estos espacios dedicados a los espectáculos habrá aseos de hombres y mujeres, así como guardarropa. Todos estos requisitos son los que deberá cumplir el Ayuntamiento.