Quizás fuera a causa del temporal por lo que durante la mañana de ayer se sucedieron los desprendimientos de cascotes en varios edificios del centro de Oviedo. Afortunadamente, no se produjeron daños personales, ni siquiera materiales más allá de los desperfectos en los propios edificios.

Los bomberos tuvieron que intervenir en la calle Uría, en el número 60, en el edificio que se conoce popularmente como "La Cúpula", tras la caída a la calle de una loseta.

No muy lejos, en el número 9 de la calle Alonso Quintanilla, ya en el entronque con la calle Foncalada, se desprendió parte de la cubierta del inmueble.

La lluvia y el viento también podrían estar detrás de la caída de una pieza de la fachada de la sede de la Facultad de Geología, hacia las once y media de la mañana. Fue en la fachada orientada hacia el noroeste, que es la más próxima al instituto Aramo.

La decana de la Facultad, Rosana Menéndez, explicó, unas horas después del suceso, que "el revestimiento de la fachada se rajó y se vino abajo". Desde el centro avisaron al servicio encargado de la gestión del patrimonio de la Universidad de Oviedo y hasta el lugar se desplazó un aparejador para revisar los daños.

El entorno del edificio, en la zona donde se precipitó el cascote, fue acordonada y los servicios de seguridad extremarán la vigilancia durante el fin de semana, según refirió Menéndez, hasta que el lunes los responsables técnicos de la Universidad puedan hacer un estudio más detenido y tomar una resolución.

Esa fachada del edificio de Geología ya había dado problemas algunos años atrás, según la decana, razón por la que permanecía andamiada. La Facultad de Geología es obra del arquitecto Ignacio Álvarez Castelao. Su primera obra pública de nueva planta fue precisamente este edificio del campus de Llamaquique, que fue ejecutado según un proyecto fechado en abril de 1965.