Los hosteleros de Oviedo, especialmente los de la zona del Antiguo, muestran un gran malestar debido a la "ausencia de programación navideña" en la ciudad. Lo dice su portavoz en la Asociación de Hostelería de Asturias (Otea), David González Codón, quien asegura que ha recibido numerosas muestras de preocupación del sector.

Uno de los principales motivos de queja es la ausencia de la pista de patinaje sobre hielo, que el año pasado se abrió el 3 de diciembre en la plaza de la Catedral y que en 2014 se instaló en Porlier. Este año aún no se sabe si se pondrá. El Ayuntamiento sacó el contrato a concurso a finales de noviembre y quedó desierto. Ahora, está abierto otro proceso de adjudicación, en esta ocasión mediante subasta, para intentar salvar la instalación. Las ofertas se pueden presentar hasta el martes. La empresa encargada de poner la pista de patinaje en las dos ocasiones anteriores, Proasur, ya ha anunciado que no se presentará a la subasta.

El año pasado, el patinaje sobre hielo fue uno de los grandes reclamos de la ciudad, no sólo durante las navidades sino también durante el puente de la Constitución. Este año todo indica que en Oviedo no se podrá patinar. Los hosteleros critican que estamos ya a 8 de diciembre "y la pista de hielo no acaba de concretarse".

Para los empresarios de hostelería de la zona del Antiguo las colas para patinar sobre hielo eran también garantía de clientes en sus establecimientos. "Este año no hay nada que haga interesante para nadie venir a Oviedo durante las vacaciones de Navidad", recalca González Codón.

Los empresarios critican la "nula" programación, no sólo por la pista de patinaje sino por otro tipo de actividades. "En otras ciudades como Gijón sí se elabora un programa navideño, mientras que en Oviedo no hay nada interesante para hacer durante estas fechas", critica el sector.

Y no se trata únicamente de utilizar las navidades como reclamo turístico. Los hosteleros no hablan sólo de lo que ellos consideran poca oferta para aquellos que pretendan venir a la ciudad desde otras comunidades, sino que aseguran también que "al no haber nada que hacer, la gente de aquí no sale de casa". Codón mantiene que ni siquiera los ovetenses acuden a la zona del Antiguo porque, insiste, "no hay nada que hacer, nada que haga atractivo salir de casa para consumir en los locales de hostelería".