El Tribunal Supremo ha ratificado el fallo de un juzgado de lo Social de Oviedo que condenó al Grupo hotelero Hotusa, actual titular de la explotación del Hotel de la Reconquista (propiedad de Hoasa) y a su actual director, José María Barrán, por acosar moralmente a una de las trabajadoras del hotel. De esta forma el Supremo desestima el último de los recursos formulado por el Hotel Reconquista y su director.

El juzgado consideró probado en su momento que la trabajadora estuvo sometida por parte del director del hotel a conductas irregulares y atentatorias contra su derecho a la integridad física y moral, llegando a iniciar una incapacidad temporal a consecuencia del síndrome ansioso depresivo en el que se sumió.

La sentencia estimaba entonces el derecho de la empleada a extinguir su contrato de trabajo y condenaba de forma solidaria a Opalo Hotels, Hotusa y al director del Reconquista al abono de una indemnización de 59.074,25 euros derivada de la extinción del contrato y 6.251 como indemnización resarcitoria del daño padecido a consecuencia de la vulneración de derechos fundamentales a la integridad física y moral. En total, más de 65.000 euros.

Comenzó entonces una dilatada batalla judicial con distintos recursos formulados por las empresas y su director que ahora culmina con el referido Auto del Alto Tribunal en el que se considera firme la sentencia de instancia dictada hace casi tres años.

El proceso comenzaba en febrero de 2015 cuando un Juzgado de lo Social de Oviedo daba la razón a una empleada del Hotel Reconquista que interponía una demanda por el acoso moral al que la sometía el director.

La demanda de la trabajadora se dirigió contra la compañía propietaria, Hostelería Asturiana SA , empresa pública cuya finalidad es la gestión del hotel de la Reconquista, así como frente a las empresa Hotusa (adjudicataria de la explotación del hotel desde julio 2014), Opalo Hotels, empresa a la que Hotusa cedió su gestión, y frente al propio director.

El abogado de la trabajadora, Diego García Diego, ha manifestado que por el camino, la entidad pública Hostelería Asturiana, S.A., se apartó del proceso al no haberse cuestionado a lo largo del mismo su falta de responsabilidad y la empleadora Opalo desistía del último de sus recursos procediendo al pago de las referidas indemnizaciones y extinguiendo el contrato de la empleada.

Es ahora cuando el Tribunal Supremo confirma la responsabilidad de la entidad Hotusa y del propio director del Hotel, último intervinientes del recurso que, al ser desestimado, impide ya la continuidad del proceso y declara con carácter firme la existencia de acoso moral.