"Que la Vega vuelva al Ayuntamiento y que se derriben sus muros", es el deseo navideño que Ana Taboada colgaba en el Árbol de los Sueños que la asociación de comerciantes del Antiguo ha colocado en el Fontán. De las ramas ya colgaban algunas varias tarjetas deseando felices fiestas o salud para todos.

La iniciativa tiene como objetivo crear imagen de marca y promocionar las ventas en el pequeño comercio. El concejal de Economía Rubén Rosón pidió trabajo digno para los jóvenes y se mostró en contra de la medida que permite a los grandes comercios del entorno de la calle Uría abrir hasta 14 festivos al año: "Habíamos logrado bloquear la zona de afluencia turística para no perjudicar al pequeño comercio pero tuvimos que modificarlo después de la sentencia que da la razón a las grandes superficies. No es una buena noticia para el comercio de la ciudad pero seguiremos luchando para que tenga el menor impacto posible", destacó Rosón.