Elena FERNÁNDEZ-PELLO
El oftalmólogo ovetense Luis Fernández-Vega Cueto-Felgueroso ha recibido el premio "Peter Barry Travelfellowship", que financia la formación en cirugía refractiva y cataratas en cualquier centro que elijan los ganadores. Él lleva ya cerca de un año en el Bascom Palmer EyeInstitute de la Universidad de Miami, en Estados Unidos, y le han ofrecido permanecer un curso más. Luis Fernández-Vega, miembro de la quinta generación de oftalmólogos ovetenses, comenta que "fuera te das cuenta del alto nivel que hay en Oviedo en oftalmología: en algunas cosas estamos más avanzados, a un nivel altísimo, aunque haya cosas mejorables".
En Estados Unidos, el oftalmólogo, de 32 años, se familiariza con patologías que no son comunes en Europa, refuerza su red de contactos y afronta el trabajo desde una nueva visión.
Llegó a Florida tras haber acabado su periodo de formación en córnea en el Moorfields Eye Hospital de Londres y ha conseguido la licencia médica del estado, algo que, por lo que cuenta, no es fácil para un europeo. En el Bascom Palmer Eye Institute, Luis Fernández-Vega afronta jornadas de doce a catorce horas, con guardias de una semana. Cuenta que el trabajo es duro pero que constituye una oportunidad única para ahondar en su formación quirúrgica, en investigación y en la práctica clínica. El centro sanitario donde trabajan figura desde hace veinte años entre los veinte mejores de los Estados Unidos.
El premio "Peter Barry" fue instituido en honor al oftalmólogo dublinés que le da nombre por la Sociedad Europea de Cirugía Refractiva y Catarata, está dotado con 50.000 euros y a él pueden optar médicos europeos menores de 35 años que desean pasar al menos doce meses formándose en centros de referencia fuera de su país. A Luis Fernández-Vega le entregó el premio Carmel Barry. la viuda del oftalmólogo que le da nombre,
Luis Fernández-Vega Cueto-Felgueroso explica que su objetivo es "aprender diferentes enfoques de patologías que son menos comunes en Europa y nuevos tratamientos quirúrgicos". Refiere que al Bascom Palmer EyeInstitute llegan muchos pacientes con tumores de superficie ocular e infecciones de cornea diferentes a las que suelen verse en Europa, y muchas personas accidentadas. Le queda un año de trabajo por delante en Estados Unidos y a finales de 2018 cuenta con estar de regreso en Oviedo.
