El río ha erosionado el patio del colegio Soto de Trubia hasta abrir una grieta. Los técnicos municipales miden a diario la fisura para facilitar la reparación posterior y estudiar si, ante un posible crecimiento, es necesario hacer una obra de mayor envergadura.

El colegio está cerrado desde junio con el fin de reformarlo y reabrirlo el próximo año como escuela infantil para menores de tres años.

La Consejería de Educación decidió trasladar a final de curso a los últimos alumnos de Soto de Trubia al otro centro de la zona, el del Villar. Se trataba de doce niños de los ciclos de Infantil y Primaria. La medida no sentó bien a las familias de Soto que llegaron a plantear al consejero de Educación una propuesta alternativa que pasaba por colocar las aulas de Infantil y Primaria en la segunda planta, dejando la primera disponible para la escuela infantil de hasta 3 años.

El Principado y el Ayuntamiento alcanzaron un acuerdo para reformar el colegio de Soto y defendieron el proyecto de convertirlo en una guardería como la mejor opción para la población porque en Trubia no existe ninguna escuela infantil de esas características y los vecinos tienen que desplazarse a Oviedo para llevar a clase a los menores de tres años.