La organización de conciertos de San Mateo en las pistas de San Lázaro depende de la aprobación del presupuesto municipal, en el que figura una partida de 689.673 euros para remodelar ese complejo deportivo adecuándolo a la normativa vigente en materia de eventos de gran afluencia de público. El proyecto pasa por la construcción de un vial de 293 metros de largo y una anchura de siete metros que permita la entrada y salida de vehículos de emergencia. En un estudio preliminar hecho hace dos años, el gobierno local estimó que la obra ascendería a unos 200.000 euros, pero lo cierto es que el precio se ha triplicado debido a "diversos requisitos técnicos". El más importante es que el vial rodeará el colegio público Veneranda Manzano y por tanto habrá que intervenir en el entorno del centro educativo sin alterar su seguridad.

La concejala de Infraestructuras, Ana Rivas, aseguró ayer a este periódico que el proyecto está "hecho, ampliado y pendiente de ejecutar este año". Es decir, en caso de obtener luz verde tras la aprobación del presupuesto, la obra podría estar acabada antes de septiembre posibilitando la organización allí de los grandes conciertos mateínos. Lo mismo dijo el edil de Festejos, Roberto Sánchez Ramos, quien además adelantó que "algunos grupos de música ya han solicitado tocar en San Lázaro durante las fiestas".

El plazo de ejecución es de cuatro meses y el proyecto también incluye la construcción de un nuevo acceso de 42 metros de longitud al aparcamiento de las piscinas de San Lázaro y la ampliación del parking. La obra principal, el vial, parte de la calle Gil Blas, rodea el colegio y vuelve a conectar con la calle Gil Blas y la Malatería.

Las obras de adecuación de las pistas de San Lázaro para que el complejo deportivo pueda acoger conciertos beneficiará al colegio, localizado en la calle Gil Blas, junto a la instalación municipal. El Ayuntamiento habilitará una salida de emergencia para evacuar las pistas en caso de necesidad. Lo hará en la zona este del complejo deportivo, detrás de una portería, y la salida dará a una zona peatonal. De esta forma, la nueva vía también servirá a la comunidad educativa, que estaba necesitada de una alternativa de evacuación eficiente.

Las pistas de San Lázaro se convertirían en el quinto escenario de San Mateo junto a la plaza de la Catedral, el Paraguas, Feijoo y el paseo del Bombé después de un paréntesis de diez años. "Mecano" lo estrenó como tal en 1990 por decisión del socialista Antonio Masip, quien justo en ese año perdió la alcaldía contra Gabino de Lorenzo (PP). Al Alcalde popular le tocó poner en marcha las fiestas de aquel año, ya diseñadas por el gobierno local anterior. Más de 20.000 personas vieron en San Lázaro a Ana Torroja y los hermanos Cano. Después, la nómina se engrosaría con nombres nacionales y extranjeros como "The Offspring", Manolo García, "Melendi", "La Oreja de Van Gogh", "El Barrio", Miguel Bosé, "Nacha Pop", "Fito&Fitipaldis", "MClan" y Andrés Calamaro, entre otros. Pero la historia de esta instalación municipal es más larga. Fue hípico y hasta canódromo, llegando a ser la sede de importantes concursos regionales y nacionales.

El complejo cuenta actualmente con una pista de atletismo de 400 metros con superficie de tartán, una zona polideportiva, sala de musculación, piscina descubierta y acceso libre y especial para miembros de clubes o personas inscritas a alguna actividad. Y es que en San Lázaro hay gimnasia de mantenimiento, aeróbic, gerontogimnasia, musculación, competiciones oficiales de atletismo y fútbol o natación recreativa, entre otras actividades. En el centro, el terreno de juego tiene 6.000 metros cuadrados.