El dramaturgo Etelvino Vázquez reflexionó ayer en el Filarmónica sobre el trabajo actoral y el propio teatro a través de la obra "Pasajero de las sombras" que él mismo dirige e interpreta a través de su compañía "Teatro del Norte".Vázquez mostró por primera vez en Oviedo este montaje más cercano a la danza que al monólogo, con veinte años de historia, en el que el protagonista contempla los personajes que interpretó en su vida como si fuesen sombras de la caverna de Platón. En la imagen, un momento de la actuación.