El servicio ferroviario de La Corredoria, aunque con la implantación de algunas mejoras, es el ejemplo a seguir en el plan que maneja el tripartito para contar con un tren urbano que funcione como si fuera un metro en superficie. El populoso barrio dispone todos los días de 170 trenes con la estación de la calle Uría, tanto de las líneas de ancho ibérico (Renfe) que van hacia Gijón y Avilés, como de los convoyes de la antigua Feve del itinerario que conecta a la ciudad con Pola de Siero, Nava e Infiesto. Esta cobertura ferroviaria con el centro de la ciudad contrasta de forma clamorosa con la que presentan el resto de apeaderos urbanos, como los de la Argañosa, Vallobín o Las Campas, que apenas llegan al medio centenar de servicios diarios con la principal terminal de la ciudad.
El concejal de Urbanismo, Ignacio Fernández del Páramo (Somos), está decidido a que el ferrocarril desempeñe un papel fundamental en la movilidad de Oviedo. Para ello, tal y como desveló el pasado domingo LA NUEVA ESPAÑA, quiere negociar con Fomento un servicio de tren específico para la ciudad, que una sus estaciones y apeaderos con frecuencias de cinco o siete minutos. El proyecto recoge la implantación de dos recorridos, uno de ellos en ancho ibérico (Renfe) y el otro en ancho métrico (Feve). El primero cubriría el trazado entre Lugones y Las Segadas, con paradas intermedias en La Corredoria, Uría, Llamaquique y El Caleyu. El segundo itinerario iría desde Colloto a San Claudio, deteniéndose el tren en Parque Principado, La Corredoria, Uría, Vallobín, la Argañosa, Las Campas y San Claudio.
El centro de este entramado ferroviario es la estación de la calle Uría, que se transformaría en un gran intercambiador de trenes, autobuses y taxis, ya que todo pasa por lograr la mayor intermodalidad y la máxima coordinación entre los diferentes modos de transporte. Para lograrlo, Del Páramo pretende que el Ministerio de Fomento aborde una rehabilitación en profundidad de la terminal, tanto en el interior como en el exterior, ya que la explanada de delante de la estación también es del Estado.
Los autobuses
En el proyecto de Urbanismo también se incluye la conexión de la estación ferroviaria de Uría con la terminal de autobuses de la calle Pepe Cosmen, con el objeto de implicar en el plan al transporte regional y de larga distancia de pasajeros por carretera. Esta obra, presupuestada en 1,2 millones de euros, iba a ser ejecutada inicialmente por el Principado, pero ha decidido renunciar a sufragarla y la reclama ahora al Ministerio de Fomento. Se trata de la única obra específicamente ovetense que se ha incluido en el listado de actuaciones de la alianza regional para exigir al Gobierno central las infraestructuras que Asturias tiene pendientes.
En principio, el tripartito no ha puesto encima de la mesa la construcción de nuevos apeaderos en el municipio, aunque ve con buenos ojos la propuesta del comité de empresa de Renfe de habilitar una parada ligada al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) al paso de la línea de la antigua Feve por Pontón de Vaqueros, en las inmediaciones de Los Castañales. Los pasajeros quedarían a unos 700 metros de distancia en línea recta de Consultas Externas. El propio Fernández del Páramo ha calificado de "incomprensible" que el centro sanitario de La Cadellada abriera sus puertas sin contar con un acceso de tren, pese a que las vías de Renfe y de Feve pasan a menos de un kilómetro de distancia del equipamiento.
