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SALVADOR TRANCHE | Médico de familia, hoy ingresa en la Academia de Medicina de Asturias

"Los políticos tienen abandonada la atención primaria"

"Probablemente estamos por debajo de los cinco minutos de dedicación por paciente, que además son cada vez de mayor edad"

Salvador Tranche. LUISMA MURIAS

Salvador Tranche Iparraguirre ejerce como médico de atención primaria en el centro de salud del Cristo (Oviedo) y preside la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc). Nacido en Yanci (Navarra), desde 1986 ha ejercido diversas responsabilidades de gestión en la sanidad pública asturiana. Hoy ingresa en la Real Academia de Medicina de Asturias, como miembro correspondiente, con la conferencia titulada "Quo Vadis atención primaria?". El acto se celebrará a las 20.00 horas en el salón de actos del Colegio de Médicos (plaza de América, de Oviedo).

- Podemos empezar por el título de su conferencia. ¿A dónde va la atención primaria?

-Cuando la Academia me propuso el honor de incorporarme a la misma, empecé a buscar un título para la conferencia y opté por éste, aunque quizá fuera más correcto decir: ¿Hacia dónde te llevan, atención primaria? La realidad es que la primaria sufre un deterioro lento, pero continuo, y quería compartir esta realidad asistencial y profesional con el mundo académico.

- Todo el mundo, incluidos los políticos, proclaman las maravillas de los centros de salud. ¿Los hechos van por otro lado?

-Sin ninguna duda. Todo se queda en el discurso. La traducción del compromiso político es la asignación del presupuesto. Y los presupuestos lo dicen todo: el gasto hospitalario ha empezado a crecer a partir de 2015 superando en un 5,2 por ciento las cifras del año 2010. Por el contrario, los recursos de la atención primaria han disminuido un 12,18 por ciento en este mismo periodo.

- Los hospitales se llevan una porción creciente de la tarta...

-En el año 2015, el gasto sanitario en atención hospitalaria superó el 60 por ciento del gasto total, cosa que no había ocurrido nunca, mientras que la atención primaria sigue con un descenso lento, y se lleva sólo el 14,2 por ciento del total. La crisis económica ha tenido un impacto notable en el sistema sanitario, pero ha sido aun mayor para la primaria. Y un dato más llamativo: el ahorro que se ha producido en atención primaria, fundamentalmente un recorte del gasto en medicamentos, ha sido destinado a engrosar el gasto hospitalario. La sanidad no está en la agenda de los políticos, y la atención primaria la tienen simplemente abandonada.

- ¿La primaria necesita más recursos humanos, más tecnología o mejor organización?

-Necesita todo. Hay evidencias de que un médico de familia más por cada 10.000 habitantes se traduce en mejoras en resultados en salud, en indicadores como mortalidad general, mortalidad por enfermedades cardiovasculares o ingresos hospitalarios. De manera que sí se necesitan más recursos.

- ¿Tecnología?

-La necesitamos desde dos enfoques: uno, más tecnología en los centros de salud. ¿Para qué? Para resolver más problemas de los pacientes.

- ¿Por ejemplo?

-Necesitamos material y equipamiento para cirugía menor, dermatoscopia para las lesiones cutáneas, ecógrafos para tomar decisiones en el punto de atención al paciente, retinógrafos para hacer el cribado de la retinopatía diabética... Y, segundo, necesitamos acceso a la tecnología: posibilidad de solicitar pruebas diagnostica: laboratorio, radiología... Pero, claro, todo lo anterior no será posible sin más y mejor organización. En este sentido, las gerencias únicas han hecho desaparecer la atención primaria. Ya no sólo no tenemos interlocución para los problemas del día a día, sino que se ha producido un retroceso extraordinario en la organización de los equipos. Los médicos sólo hacemos asistencia y tenemos una imposibilidad absoluta de hacer cualquier otra actividad: docencia, investigación, estudio... Incluso la asistencia es muy acelerada: probablemente estamos por debajo de los cinco minutos de dedicación por paciente. Y los pacientes son cada vez de mayor edad, con más problemas de salud y de mayor complejidad. Necesitamos tiempo para hacer una medicina más reflexiva, mas parsimoniosa.

- ¿Se piden demasiadas pruebas diagnósticas? ¿Impera la medicina defensiva?

-Mi impresión personal es que sí, y que intervienen muchos elementos. Por ejemplo, la ya mencionada sobrecarga asistencial, que imposibilita poder dedicar unos minutos a tratar la pertinencia o no de realizar una prueba para el paciente. Es mucho mas rápido no discutir y solicitar la prueba.

- ¿Se derivan demasiados pacientes a los hospitales?

-No lo sabemos, porque no hay estudios que determinen cuál es la tasa de derivación correcta o adecuada. Los profesionales no tenemos información de lo que hacemos.

- ¿Ve viable que un especialista, desde el hospital, oriente al médico de primaria mediante videoconferencia o algún sistema similar?

-Sí, claro que sí, pero no lo veo muy relevante, en concreto la videoconferencia, salvo para zonas muy alejadas. No necesitamos tanto reorientación como compartir la información y la toma de decisiones.

- ¿Tiene la atención primaria asturiana alguna singularidad con relación a la del resto de España?

-En Asturias se asignan 1,4 puntos porcentuales menos a la atención primaria que la media del país. Sólo corregir este déficit supondría una aportación importante. Por lo demás, el comportamiento es el mismo que el de otras comunidades autónomas. La pena es que Asturias tiene condiciones políticas -comunidad uniprovincial, población adecuada- y capacidad intelectual suficiente para avanzar muy por delante de las otras regiones. Falta impulso político y gestor.

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