Las grandes joyas de la catedral de Oviedo gozarán próximamente de la máxima protección que contempla la legislación:_la consideración como Bienes de Interés Cultural (BIC). Una categoría el Consejo de Patrimonio Cultural del Principado de Asturias ha propuesto conceder a 56 bienes muebles de la basílica ovetense, entre ellos sus retablos -incluido el monumental Retablo Mayor-, la sillería de coro o las joyas de la Cámara Santa. Una medida que, a juicio de los especialistas, era necesaria y viene a paliar una carencia en la protección patrimonial de esas piezas, aunque para el cabildo no supone una gran diferencia en el trato que se les dispensa ni en su valoración.
"La catedral de Oviedo ya es BIC, y por lo tanto cualquier bien mueble que se conserve en su interior está protegido. Cualquier actuación que queramos hacer en ellos ya tiene que pasar por la Consejería, así que en ese aspecto, en el día a día, no nos afecta mucho", sostiene Benito Gallego, deán de la catedral de Oviedo. A su juicio, el cambio en la consideración de estos bienes atañe más a la administración que a la Catedral:_"Para nosotros ya tenían esa consideración patrimonial. Hay cosas que me chocan, como que incluyan las reliquias, el Santo Sudario... Son patrimonio de la iglesia, si, y entiendo que también atañen a la administración en tanto que atraen visitantes. Luego están piezas como el Retablo Mayor, que obviamente a nadie se le ocurre que se vaya a mover de ahí. Pero ese es el ejemplo: para la limpieza especial que hicimos recientemente ya tuvo que pasar por el Consejo de Patrimonio. Por eso entiendo que atañe más a la administración que a la iglesia. Pero sí que pienso que, en igualdad de condiciones, un elemento declarado BIC tendrá prioridad y más facilidades para una restauración que otro que no lo es. En ese sentido, sí que es posible que la Catedral haya salido beneficiada".
Centrando el foco en la administración y en el espíritu de la Ley de Patrimonio Cultural, sí que resulta extraño que bienes de esta relevancia histórico-artística no gozasen, por sí mismos, de una protección como la que tendrán una vez que el Gobierno de Asturias ratifique la propuesta del Consejo de Patrimonio Cultural.
"Es una propuesta idónea. Hacía mucha falta que se diese este paso, porque el concepto que había del monumento era el continente, el edificio, y en términos generales todo lo que estaba dentro estaba protegido. Pero lo estaba únicamente por un hecho físico, no administrativo. Esto dará raigambre, consideración y entidad a unos bienes muebles que son bienes patrimoniales en sí mismos", precisa Javier González Santos, profesor del departamento de Historia de Arte de la Universidad de Oviedo, que participó en la selección de las piezas propuestas para su declaración como BIC.
Además de esos 56 bienes muebles de la Catedral, el Consejo de Patrimonio ha propuesto también catalogar como BIC un total de 36 hórreos singulares, y la iglesia de Santa María de Tina y la ermita de Santu Medé, ambas en Pimiango (Ribadedeva).
El Santo Sudario, objeto de veneración
El Santo Sudario es la reliquia más importante que se conserva en la Catedral, y el principal foco de atracción de peregrinos a Santiago desde la Edad Media. No se debe olvidar que la Cámara Santa es un relicario y el Sudario es la pieza principal. El Jubileo de la Santa Cruz, del 14 al 21 de septiembre, tiene como principal objeto de veneración el Sudario y esa fiesta termina el día 21 de septiembre: San Mateo. No es casualidad, es que en Oviedo el día de San Mateo sea fiesta: era el día grande del fin del Jubileo. Hoy en día sigue siendo objeto de veneración.
Capilla de los Vigiles: retablo
Aunque suele pasar desapercibido, el retablo de la capilla de los Vigiles es uno de los más importantes de la Catedral. Las tablas con relieves son obra de Luis Fernández de la Vega (1601-1675), formado en el taller castellano del gran Gregorio Fernández (1576-1636).
Capilla de los Vigiles, con el retablo al fondo. | mara villamuza
La exhibición del Santo Sudario en la Catedral,
durante la misa de la Perdonanza. | irma collín
Retablo de las Lamentaciones
Situado actualmente en la Sala Capitular, era la parte más importante del sepulcro de Juan de Candamo y de las Tablas, maestro de la Catedral y de su mujer, Catalina González de Nava, el cual estaba en el brazo sur del crucero. Pieza escultórica única en Asturias, quizá importada, en la que los difuntos aparecen como donantes, arrodillados a los pies de la escena sacra siguiendo una de las composiciones más repetidas de la iconografía tardogótica.
Joyas de la Cámara Santa
Proezas como las Cruces de los Ángeles (808) y de la Victoria (908) o la Caja de las Ágatas (910) son joyas de la orfebrería altomedieval que, además de su elevado valor artístico, tienen un indiscutible valor inmaterial por ser elementos identitarios de Asturias.
Arqueta relicario de Santa Eulalia
Una verdadera joya de la orfebrería altomedieval española. Es una obra del siglo X u XI, no hay acuerdo entre los especialistas. Procedente de un taller musulmán, fue reutilizada como relicario posteriormente.
Sillería del coro de la Catedral
A pesar de haberse perdido la mayor parte de la sillería, así como la impresionante cátedra del Obispo Juan Arias del Villar, es una pieza de gran valor, atribuida a Alejo de Vahía ( c. 1515). Se conservan 5 estalos altos ( de un total de 45) y 23 bajas (de un total de 35).
Retablo del Cristo de Velarde.
Aunque se propone otorgar la declaración BIC al Retablo del Cristo de Velarde, lo que destaca por encima de todo el conjunto en esa pieza es la imagen centras de Cristo en la cruz. Se trata, probablemente, de la mejor escultura que se conserva en la catedral de Oviedo, y una pieza capital, dentro de su género y época, en toda la región. El Cristo de Velarde está atribuido al palentino Alonso Berruguete (c. 1490-1561), uno de los mejores escultores castellanos del siglo XVI.
