"Oviedo, al referirnos a sus calles, se cae a pedazos, igual que usted mire a la derecha que a la izquierda. Todas nuestras calles muestran descomunales cicatrices, unas originadas por el constante ´tapa y destapa´ de los servicios públicos: otras por el excesivo trafico que sufren, otras, las más de las veces, por la acción del tiempo. Los ejemplos que se pueden poner son muchos, como el de Independencia".